La farmacia se vuelca con Siria

El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valladolid (Cofva) ha hecho entrega de su Obra Social 2016, en esta ocasión a través de una convocatoria extraordinaria, «porque hemos considerado que la situación que se está viviendo en Siria requiere de la colaboración de todos, y especialmente de nuestra parte en aquellos temas relacionados con el ámbito sanitario», explica Juan de Dios Jódar Pereña, presidente del Colegio. Concretamente, el dinero ha sido concedido a la ONG Farmacéuticos sin Fronteras, entidad que ya fue beneficiaria de la Obra Social del Cofva en el año 2014 en su proyecto de colaboración con los damnificados por el tifón en Filipinas.

Al acto han acudido como representante de Farmacéuticos sin Fronteras, su director Técnico, Ángel Huélamo Villanueva, así como el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valladolid, Juan de Dios Jódar Pereña.

Los 3.500 euros de los que se encuentra dotado el Premio serán destinados a la adquisición de material hospitalario, «reclamado de forma directa desde las entidades que trabajan en el terreno, concretamente con la Asociación de Apoyo al pueblo Sirio, y con quienes llevamos colaborando desde nuestra intervención en este país en el año 2013», comenta Ángel Huélamo, director técnico de FSF.

De esta forma, se cumple con el objetivo de la Obra Social del Colegio, «tratando de dar respuesta a aquellas necesidades de carácter sanitario y comunitario, tanto en nuestra ciudad de origen como más allá de las propias fronteras de nuestro país, como ha venido sucediendo en anteriores convocatorias», añade Juan de Dios.

En esta ocasión, el dinero de la convocatoria será destinado, concretamente, a la compra del siguiente material «pedido específicamente por las organizaciones humanitarias en Siria, y que ha sido seleccionado a modo que satisfagan dichas necesidades de la manera más completa posible». reiteran desde FSF.

Así, los hospitales ubicados en las localidades de Idleb y Hama podrán contar con delantales plomados de cuerpo entero con velcro, necesarios para poder realizar aquellas pruebas médicas donde se produzcan radiaciones, así como un bomba de infusión Infusomat Space, un dispositivo electrónico capaz de suministrar, mediante su programación y de manera controlada, una determinada sustancia por vía intravenosa.

«El uso de este último dispositivo es muy importante porque disminuye el porcentaje de errores humanos en el suministro intravenoso de medicamentos, pero debido a su elevado costo son pocas las instituciones de salud que en lugares como Siria, cuentan con esta tecnología», aclaran desde la ONG. A estos materiales se unen otros como un catéter intravenoso, sin alas, estuchado individual y estéril, o vendas de gasa. Este material será enviado a través de contenedores junto con otra ayuda humanitaria que gestiona la ONG FSF. Los contenedores salen desde Valencia con destino Mersin (Turquía), donde son recibidos por organizaciones como Deniz Feneri, IHH, Plataforma médica de la provincia de Hama para, posteriormente, hacerlos llegar hasta los hospitales seleccionados.