La Bajada del Ángel de Aranda de Duero y Peñafiel

Ciudades y pueblos de la Comunidad son este domingo escenarios del Encuentro entre Jesús Resucitado y la Virgen de la Alegría. Pero, además, hay otros actos especialmente singulares y con una gran tradición, como es la Bajada del Ángel que se celebra en la localidad burgalesa de Aranda de Duero y en la vallisoletana de Peñafiel.

Un niño de poco más de cinco años volvió a ser protagonista en el Domingo de Pascua de la localidad burgalesa de Aranda de Duero, donde la Bajada del Ángel será la fórmula elegida una vez más para anunciar la resurrección de Cristo.

Manuel Martín López, estudiante del Colegio Claret que hasta el próximo 31 de octubre no alcanzará los seis años, ha sido elegido por la Cofradía de las Candelas y Nuestra Señora de la Misericordia para desempeñar el papel principal de una celebración de origen incierto pero que los más aventurados sitúan en el siglo XV y la vinculan con los autos sacramentales.

«No se conoce bien el origen. Lo que sí se sabe es que en el siglo XV ya se hacía. Y no hay constancia de que en Aranda haya dejado de celebrarse ningún año, por ningún motivo», señala a la Agencia EFE Miguel Ángel, responsable de la cofradía organizadora del acto, la más antigua de cuantas existen en Aranda de Duero.

La cita este año será mañana a mediodía, frente a la espectacular fachada sur de la iglesia de Santa María, joya del gótico isabelino, donde cada Domingo de Pascua se concentran miles de arandinos y visitantes para ver en primera persona una ceremonia que ya solo puede disfrutarse, además de en la capital ribereña, en Peñafiel (Valladolid),