El 77% de los padres no orienta a sus hijos hacia la FP por su «mala imagen»

Los padres son los principales consejeros de los jóvenes cuando acaban el instituto y encaran su futuro laboral. El 67 por ciento recurren a su ayuda para tomar la decisión sobre qué camino seguir y se encuentran con unas recomendaciones guiadas hacia la Universidad que descartan otras alternativas. La Formación Profesional sigue, así, sin desprenderse del estigma. Y es que el 77 por ciento de los progenitores reconoce que ni siquiera han hablado de esta posibilidad educativa con los orientadores de sus hijos. ¿Los motivos? «Tiene una mala imagen» que justifican en la creencia de que «tiene una menor consideración social» y en que «sólo la estudian quienes no pueden conseguir carreras superiores».

Esta respuesta contrasta con la «realidad» del mercado laboral, en el que existe una mayor demanda de empleados procedentes de Formación Profesional, lo cual se plasma en la «altísima tasa» de inserción -por encima del ochenta por ciento- de sus estudiantes, que encuentran trabajo «inmediatamente». «Esa consideración de que los que valen» cursen una carrera y los que no FP, «hoy en día no es así», señaló ayer la directora general de Innovación y Equidad Educativa, María del Pilar González, tras la presentación del Informe Educa 2020, realizado por Sigmados con el apoyo de la Fundación AXA, en el que se ahonda en esa «mala imagen» de esta modalidad educativa, al respecto de la cual los padres piden que sea «publicitada adecuadamente desde el Gobierno», otorgándole el rango universitario e incluso «cambiándole de nombre».

El objeto del estudio era analizar si «¿Juegan los padres un papel acertado en la educación de sus hijos?». Una pregunta a la que no se contesta directamente pero que llevaría implícita una respuesta negativa si se contraponen los resultados con las «necesidades del mercado laboral», tanto en lo referente a FP como a las carreras universitarias. El informe refleja que la orientación de los padres no se ajusta a la «demanda», que llama cada vez más a un perfil laboral tecnológico, mientras los progenitores de Castilla y León recomiendan la vía científica, la más elegida en Bachillerato, y por encima de la media nacional.

Para orientar a sus hijos, los padres tienen en cuenta que sean felices, tengan vocación y se aseguren una buena compatibilidad de su vida laboral y personal futura; y toman como fuente de información internet. Es la vía más reclamada, por más de la mitad, siendo la segunda la consulta con el tutor del alumno, algo que desde Educación esperan revertir con el nuevo modelo de orientación.