Campaña andaluza para atraer a los llamados nómadas digitales y energéticos

Alejandro trabaja para una multinacional norteamericana y desde febrero lo hace desde un apartamento de Benalmádena. Además de mejorar su productividad, cambió Madrid por Málaga para ahorrar costes. Huyendo del frío invierno Patrick, un jubilado francés, llegó en septiembre a Torremolinos y se va a quedar hasta mayo. La Junta de Andalucía quiere posicionarse como destino estrella de estos nómadas digitales y energéticos después del éxito de Canarias. Las islas se están convirtiendo en el epicentro de este tipo de trabajadores en remoto que desde la pandemia trabajan desde distintos puntos del mundo en función de la calidad de vida, del buen tiempo y del ahorro energético. -Redacción-