Otra amenaza de huelga complica la Navidad a la órbita de Podemos en Zaragoza

El autobús urbano lleva camino de complicarle las navidades a la órbita de Podemos instalada en el gobierno municipal de Zaragoza, con el alcalde Pedro Santisteve al frente. Menos de un año después de haber protagonizado el paro de autobuses más largo en la historia de la capital aragonesa, los sindicatos de la concesionaria plantean otra más para todas las navidades.

Mientras tanto, el gobierno municipal de ZEC (Podemos-IU) prefiere mantenerse al margen y contemporizar con quienes proponen nuevos paros. Este lunes, dos concejales de ZEC recibieron en el Ayuntamiento a sindicalistas de la concesionaria, Auzsa, para hablar de la situación. Al término de estos encuentros, el concejal de Servicios Públicas, Alberto Cubero, pidió «un gesto» para evitar los paros, pero evitó abogar abiertamente por mostrarse contrario a la huelga.

«Nos hemos limitado a escuchar», remarcó.

Esto se produce después de que el gobierno municipal de Santisteve saliera erosionado de la larga huelga que se prolongó hasta la pasada primavera y que sumó 123 días de paros en los autobuses urbanos de Zaragoza. Se dispararon las quejas de los ciudadanos y los grupos de la oposición censuraron a ZEC por partida doble: primero, por considerar que esa huelga era consecuencia directa de las expectativas generadas por la coalición Podemos-IU cuando, en las elecciones municipales de 2015, prometió abiertamente la «remunicipalización» de servicios; y, segundo, por considerar que, con la huelga en marcha, no actuó como debía para haber solucionado el conflicto con celeridad.

Ahora los sindicatos de Auzsa están decididos a parar de nuevo en plenas fiestas navideñas. En concreto, del 27 de diciembre al 8 de enero, y concentrando la huelga en horarios clave.

Acusan a la dirección de la empresa de haber incumplido acuerdos reflejados en su convenio laboral y le recriminan diversos expedientes sancionadores impuestos a trabajadores. Desde la compañía consideran injustificada e injustificable esta nueva huelga y, respecto a los expedientes de sanción, subrayan que están plenamente argumentados por faltas cometidas por algún conductor como saltarse semáforos en rojo o ir al volante utilizando el teléfono móvil.

Este miércoles se sabrá finalmente si los trabajadores de los autobuses urbanos de Zaragoza van a la huelga y en qué condiciones. Lo votará internamente la plantilla en una consulta convocada por los sindicatos.