Abre sus puertas el primer museo inspirado en la chapuza: el eccehomo de Borja

La fallida restauración de una pequeña pintura mural en un pequeño santuario de un pequeño municipio zaragozano acabó convertido en icono de fama internacional. Y, ahora, en objeto de museo. Borja acaba de inaugurar su Museo del Eccehomo de Cecilia.

Paradojas de la vida que quedan para la historia: los pinceles del artista que hizo este modesto fresco hace casi cien años. Elias Martínez no obtuvo fama alguna por este fresco. De bella factura, de esmerada ejecución, esa pintura de menos de un metro cuadrado no pasó de ser una más de un pequeño templo en un rincón de la geografía aragonesa.

Aquella pincelada de arte no alcanzó la fama, pero sí el chapucero resultado al que condujo la voluntariosa afición de una octogenaria de la localidad.

Cecilia Giménez, aficionada a la pintura y con décadas de práctica, ducha en estas lides, sin embargo pinchó estrepitosamente en su intento por restaurar la deteriorada pintura del artista Elías Martínez. Ocurrió en el verano de 2012. Y, paradoja, ahí llegó la fama mundial.

El resultado de ese fiasco restaurador acabó dando la vuelta al mundo. Mofa masiva que pronto pasó a ser rentable. Borja vivió lo que nunca antes había vivido: una masiva llegada de turistas para fotografiarse junto al esperpéntico eccehomo de Cecilia. Y la octogenaria, del disgusto inicial, pasó a la satisfacción de comprobar que, involuntariamente, había contribuido a proyectar espectacularmente el nombre de esta pequeña localidad.

Con el paso de los años, la chapuza se ha convertido en icono. Y Cecilia en «heroína» de Borja, que ahora le ha reconocido su «mérito» públicamente con la inauguración de un museo dedicado a su peculiar «refresco» pictórico (el rehecho y maltrecho fresco original de Elías Martínez).

Cecilia Giménez, orgullosa del balance final

Cecilia Giménez tiene ahora 85 años. Sigue cultivando su afición a la pintura entre sus quehaceres domésticos. Y, lejos de recordar la amargura por la mofa inicial, dice estar «orgullosa» de todo a lo que ha contribuido su fallida -aunque voluntariosa- restauración.

Coincidiendo con la presentación de un documental realizado por la cadena británica Sky TV, Borja ha inaugurado esta semana el Centro de Interpretación del Eccehomo de Cecilia. Se hace un repaso didáctico a toda la historia que ha rodeado a este rentable fiasco, desde la pintura original que plasmó Elías Martínez en 1930. Pero, sobre todo, está dedicado al resultado del espontáneo esfuerzo restaurador de Cecilia Giménez.

El nuevo museo

En estas salas se muestran también 38 obras presentadas en las dos primeras ediciones del concurso internacional de pintura impulsado por la Asociación de Vecinos del Santuario de la Misericordia -templo del famoso eccehomo-, así como la historia de Cecilia, la repercusión mediática mundial que tuvo la fallida restauración, e incluso un fotomontaje en el que cualquier visitante puede hacerse una foto con el rostro del famoso eccehomo.

El museo se ha habilitado en el caserón situado junto al Santuario de la Misericordia, que forma parte del conjunto de este templo. La entrada cuesta dos euros. Lo que se recaude irá destinado a la Fundación Benéfica Sancti Spiritus y Santaurio de la Misericordia, que gestiona una residencia para afectados por minusvalías severas y que atiende a 72 personas.

De hecho, la beneficencia ya se ha nutrido en estos últimos cuatro años del flujo de visitantes que ha acudido a ver el eccehomo de Cecilia. Desde el verano de 2012, más de 170.000 personas -muchas de ellas extranjeras- han acudido a verlo. Y eso ha dejado una cuantiosa cifra en donativos.

La proyección del fiasco sigue subiendo peldaños y dando de sí para producciones de lo más diverso. Por ejemplo, el próximo 20 de agosto está previsto el estreno mundial, en Borja, de una ópera sobre el eccehomo de Cecilia. La ha producido el estadounidense Andrew Flack.