Díaz comparte mitin con Sánchez sin apenas mencionarlo y marcando distancias

Por fin, este miércoles se ha producido en Alcalá de Guadaira (Sevilla) el esperado encuentro de Pedro Sánchez con Susana Díaz después de semanas de tensión en el interior del PSOE, un partido que vive el efrentamiento entre ambos con la angustia de no saber si lo ocurrido le va a pasar factura en las elecciones autonómicas y municipales.

Sánchez se juega este domingo, no su candidatura a la Presidencia del Gobierno -ya ha dicho que se presentará, pase lo que pase, a las primarias del 26 de julio-, sino la tranquilidad de hacerlo sin competencia interna. Y Díaz, que se resiste a darle el placet, está esperando a comparar los resultados que saque él en toda España con los que ella espera en Andalucía, sustancialmente mejores.

Por eso, el encuentro ha sido frío. A la entrada, Díaz ha hecho el «paseíllo» con los suyos, el candidato a alcalde de Sevilla, Juan Espadas, el alcalde de Alcalá de Guadaira, Antonio Gutíerrez Limones, y el «número dos» del PSOE-A, Juan Cornejo. Detrás, a tres o cuatro metros de esa nube de abrazo y besos, otra nube, de igual magnitud, para Pedro Sánchez, muy aclamado por las bases. Como el mitin ha empezado tarde, Díaz se ha «comido» los minutos de los informativos televisivos y no solo eso, sino que solo ha mencionado a Pedro Sánchez una vez, de pasada.

La presidenta en funciones de la Junta ha preferido centrarse en la «crueldad» de Mariano Rajoy por decir que los españoles ya no se preguntan por el paro. Y ha censurado que tanto el presidente del Gobierno, como José María Aznar, como Soraya Sáenz de Santamaría han dedicado los últimos días «a meterse conmigo»