Las regiones del PSOE, las que crearon más empleo público en víspera electoral
Tres de cada cuatro puestos de trabajo generados desde el comienzo del Gobierno de Pedro Sánchez fueron en la Administración Pública
La cercanía de las elecciones generales, autonómicas y municipales se ha dejado notar este año en forma de un fuerte aumento del empleo público. Un incremento que se ha producido, sobre todo, en las comunidades autónomas y más concretamente entre las regiones gobernadas por el PSOE. Baleares, con un alza interanual en el primer trimestre de 2019 del empleo público del 20,3%; Navarra, del 16%; Aragón, del 11,3%; Cataluña y Canarias, con un 10,7% ambas; y Castilla-La Mancha, con un 6,6%, son las comunidades en las que más aumentó el trabajo público en el año previo a las elecciones. En la mitad de ellas (Baleares, Aragón y Castilla-La Mancha) gobierna el PSOE en coalición. Estos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de 2019 incluyen la creación de puestos de trabajo de todas las administraciones, pero el empleo autonómico aglutina más de la mitad de las plantillas públicas y fue responsable del mayor aumento en términos absolutos.
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El empleo público creció así en toda España un 3,47% durante el último año. Como únicas regiones en las que se destruyeron puestos de trabajo de la Administración figuran La Rioja (con una caída del 10,4%), Murcia (-7%), Madrid (-3,9%), Extremadura (-1,7%) y Andalucía (-0,14%). En el último año se crearon 107.800 empleos públicos. Las áreas que elevaron la contratación con más fuerza, precisamente , fueron las ocupaciones elementales donde la ocupación ha crecido un 15%, seguidos de las militares (un 10,4% más).
Si acotamos a lo que ocurrió estrictamente en los tres primeros meses del año, las comunidades en las que más aumentó la creación de trabajo público fueron también regiones socialistas: entre las comunidades donde se creó más empleo público están Asturias (4,4%), Aragón (4,1%) y Extremadura (3,1%) -las tres gobernadas por el PSOE-, seguidas de Murcia y Navarra (2%), Castilla y León (1%) y Andalucía (0,5%). De media, en los tres primeros meses del año el empleo público se incrementó un 0,08%, es decir, 2.600 puestos de trabajo.
Ello contrasta con lo que ocurrió en el sector privado que destruyó 96.100 empleos en los primeros tres meses del año, aunque si se toman las cifras desestacionalizadas -es decir, descontando el efecto de la Semana Santa , que este año cayó en abril y no en marzo como el año pasado-, hubo creación de empleo, con un aumento de la ocupación total del 0,76%.
Pero, ¿quién fue el gran motor del empleo entre las distintas administraciones? En términos absolutos, las comunidades autónomas: las regiones crearon 63.800 empleos, un 3,5% más en los últimos doce meses. Ayuntamientos y diputaciones, eso sí, lideraron el aumento porcentual con un 6,5% aunque en términos absolutos fueron 40.600 nuevos empleos. La Administración Central elevó la ocupación un 1,2%, en lo que supone crear 6.300 empleos. Como destacó ayer el Banco de España, pese al fuerte aumento tanto comunidades -al bajar el ritmo de creación del 5,1% al 3,6%)- y administración local -un 6,6% en el cuarto trimestre de 2018- ya venían con ritmos elevados de creación de empleo meses atrás.
Durante el mandato de Pedro Sánchez, el empleo público fue el gran protagonista. Desde julio de 2018 a marzo de 2019, la economía generó 127.000 empleos, de los que el 75% correspondieron a puestos de trabajo públicos, 95.800, frente a los 31.300 del sector privado. Es decir, tres de cada cuatro empleos generados desde la segunda mitad de 2018 al primer trimestre de 2019, son del sector público.
Las comunidades autónomas, que con 1,826 millones de empleados públicos aglutinan el 56% del trabajo en la Administración al concentrar las principales competencias (Sanidad, Educación, etc), elevaron en 52.100 efectivos sus plantillas en estos nueve meses (un 2,9% más). Los ayuntamientos crearon 27.000 puestos de trabajo (un 4,2% más) y el Estado, 3.500 (con un incremento del 0,6%).
El acuerdo firmado por el aún ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en marzo de 2018 con los principales sindicatos de la Administración, explica estas cifras, al pactar tasas de reposición del 100% en aquellos subsectores que cumplieran el déficit -de lo contrario bajaba al 75%- y por encima del 100% en servicios considerados esenciales como Sanidad, Educación, fuerzas y cuerpos de seguridad, lucha contra el fraude, Empleo y demás.
Acuerdo público
Estas condiciones, que incluían los Presupuestos de 2018 que aprobó primero el PP y Ciudadanos y después, el propio PSOE cuando subió al poder, posibilitaron la aprobación de las correspondientes ofertas de empleo público en todos los niveles de la Administración. En el caso del Gobierno Central, fue el departamento dirigido por Meritxell Batet el que desarrolló la oferta de la Administración General del Estado de 2018, que fue en su momento la mayor en diez años hasta que el Ejecutivo de Pedro Sánchez aprobó el mes pasado la de 2019, a un mes de las elecciones, con más de 32.000 empleos y marcando otro récord.
De esta forma, con este repunte el número de empleados de la Administración según la EPA, incluyendo empresas públicas, asciende a 3.213.600 trabajadores, la mayor cifra desde el cuarto trimestre de 2011. Pese a ello, CSIF criticó que un 26,8% de los empleos son temporales, esto es, 862.800 la mayor cifra de la serie histórica.
