El Gobierno recortará el gasto en 2.000 millones de euros en 2016 para ajustar el déficit

El Gobierno aprobará en próximas fechas un recorte de 2.000 millones sobre los Presupuestos Generales del Estado de este año. Así lo ha anunciado en el Consejo de Ministros de hoy para dar ejemplo a las regiones y contener el déficit de este año. Se trata de un acuerdo de no disponibilidad de créditos parecido al que ha pedido a los barones autonómicos. «Aplicamos lo que le vamos a pedir a las comunidades autónomas esta tarde», ha resumido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la rueda de prensa posterior.

En sus palabras, el recorte de 2.000 millones no tocará partidas de gasto social ni de seguridad o prestaciones por desempleo. Tampoco afectará a las becas de Educación o las transferencias a Adif por gasto de mantenimiento.

El ministro adelantó que 950 millones del ajuste se centrará el capítulo VIII de los Presupuestos Generales del Estado, los activos financieros, en aquellos gastos con impacto en el déficit público y en las partidas de los ministerios de Economía, Industria, Energía y Turismo y Fomento.

Montoro irá así a la reunión de esta tarde con las comunidades con el recorte sobre el gasto público del Estado ya aprobado. Este ajuste es equivalente a dos décimas del PIB, después de que España superara en ocho el objetivo de déficit de Bruselas del año pasado –que contemplaba un desequilibrio entre gastos e ingresos públicos del 4,2% frente al 5% en el que cerró–.

De esta forma, el Gobierno da el primer paso para cumplir la recomendación que le envió Bruselas en marzo para contener el déficit. La Administración del Estado, según la Autoridad Fiscal, iba a cumplir con el déficit este año, pero no con la regla de gasto, que limita el desembolso público.

La otra parte del ajuste pedido por la UE la intentará imponer Montoro esta tarde en la reunión con los consejeros autonómicos de Economía en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. En el encuentro pedirá a las regiones que sigan la estela del Estado y recorten partidas presupuestadas. Estas medidas deberán incluirse en planes de ajuste y económico financieros que hagan viable el cumplimiento del objetivo de déficit para este año. Estas peticiones han motivado la rebelión de los barones regionales, que piden que el Estado asuma un mayor grado de ajuste.

«Estoy convencido de que esta tarde todo el mundo va a estar de acuerdo en el cumplimiento objetivo de estabilidad. Todos somos parte de Europa, todos estamos convencidos de que la estabilidad es base de la recuperación», ha valorado Montoro.

Las autonomías, junto a la Seguridad Social, fueron las grandes incumplidoras el año pasado desde el punto de vista de las arcas públicas: si debían bajar su desfase presupuestario al 0,7% del PIB, duplicaron este límite hasta el 1,66%. En 2016 deben cerrar en el 0,3% del PIB, en lo que supondría un ajuste de 13.000 millones.