Voces frente a la crisis
Félix Revuelta (Naturhouse): «En Francia e Italia sí sabíamos cómo prepararnos para abrir; aquí, no»
Naturhouse denuncia la tardanza en la información para encarar la reapertura
En el día de ayer los comercios podían retomar la actividad en las tiendas físicas con restricciones, pero solo un pequeño porcentaje se atrevió a hacerlo. La fase 0 de la desescalada del Gobierno no cambió el panorama a la mayoría de las empresas, bien porque no les compensaba abrir ante los estrictos requisitos para garantizar la seguridad, o bien porque todavía no tuvieron tiempo para amoldarse a las directrices que el Gobierno dio a conocer a menos de 24 horas para que empezara dicha fase. Medidas de protección como que los trabajadores dispongan de equipos de protección individual fueron imposibles en tan corto espacio de tiempo.
Una de estas empresas que ayer todavía no pudo empezar a funcionar presencialmente fue Naturhouse. Según explica a ABC su fundador, Félix Revuelta , la compañía se está preparando para ello, aunque eleva su queja al Gobierno por la tardanza a la hora de explicar las medidas de seguridad. «En Francia e Italia sabíamos lo que teníamos que hacer para prepararnos. Aquí, no», denuncia. Aun así, el dueño de la empresa especializada en la venta de productos dietéticos y en el asesoramiento alimenticio comenta que se aprovisionaron de geles, guantes y mascarillas para poder empezar a realizar sus consultas a la distancia de seguridad estipulada. Además, relata que todos sus empleados se han podido realizar los test porque «se han pagado privadamente. No puedo permitir que uno vaya infectado a trabajar».
Naturhouse es la enseña principal del grupo Kiluva , fundado por Revuelta en 1986, que agrupa a empresas de diversos sectores, como inmobiliarias, perfumerías, cosmética, aviación y hostelería, y que cuenta con unos 5.000 trabajadores en su plantilla. El pasado año logró un beneficio de 13,1 millones de euros y facturó 81,6 millones de euros, unos resultados algo menores que en 2018 debido a la expansión internacional del grupo, que pretende también incrementar su venta online. Esta visión internacional ha propiciado que Naturhouse esté presente en una veintena de países de todo el mundo , destacando Francia, Italia, EE.UU., Inglaterra, Bélgica y Polonia.
Críticas al Gobierno
La crisis del coronavirus ha provocado que todas sus tiendas físicas se hayan cerrado momentáneamente , a excepción de Polonia y la venta online. Este parón, estima Revuelta, dejará un impacto de la facturacióndel 50%. Su presencia en varios países le ha servido para conocer cómo han actuado los gobiernos a la hora de ayudar a las empresas, donde España, según recalca, no ha salido bien parado. «En Francia lo han hecho bastante mejor que nosotros. El estado ha aprobado unos sellos a las empresas que te dan el 20% de tu facturación. A un precio bajo para que se puedan financiar. A nosotros nos viene muy bien porque nos soluciona en principio la tesorería. En España todavía no sabemos qué va a pasar porque hay mucha burocracia para que te concedan un crédito», ejemplifica.
Con el parón de la economía, Naturhouse recurrió a los ERTE por fuerza mayor para tratar de garantizar el empleo. Un hecho que ahora no da por seguro si los ERTE no continúan más allá del estado de alarma. «Si nos lo ponen complicado tendremos que cerrar cosas» , lamenta Revuelta a la vez que vaticina que muchos empresarios se tendrán que reinventar. El empresario achaca la mala gestión de nuestro país a la poca valía de los miembros del Gobierno : «Los políticos tienen que buscar gente más capaz. Yo como empresario no cojo a los amiguetes».
El fundador de Naturhouse continúa en su crítica al Ejecutivo de Pedro Sánchez por no haber cerrado Madrid, Barcelona y las grandes capitales desde el primer momento como sí se hizo en China con Wuhan. Alude que «hay muchos municipios que no saben lo que es el virus» y aun así tiene que tener sus tiendas cerradas. «En la Costa del Sol el foco está en Málaga pero hay localidades que no han tenido ningún caso. Esto ha sido matar moscas a cañonazos», denuncia. Así, vaticina una vuelta a la normalidad muy dura porque «hemos paralizado toda la industria del país a lo loco», explica.
Por eso no le sorprende que el paro se dispare como lo está haciendo y que muchas personas estén sin recursos cuando se empiece a salir de la crisis. «Cuando el engranaje industrial se estropea lo hace fuertemente . No es lo mismo cerrar el 100% de la economía que un 60%» , sentencia.
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