España se ahorrará 15.000 millones de euros en la factura energética

España se ahorrará este año 15.000 millones de euros en su factura exterior energética por la caída en los precios del petróleo, según estimaciones del Ministerio de Economía.

Y es que la marcada tendencia bajista en la cotización del petróleo en los mercados internacionales desde finales de abril (-28%) tiene un significativo y positivo impacto en la economía española, al ser un país muy dependiente en hidrocarburos.

Esta repercusión se traduce en un crecimiento adicional del PIB español de aproximadamente tres décimas (0,3%), según los cálculos que maneja el Ejecutivo y a los que ha tenido acceso ABC. En el último trimestre del año pasado, cuando el petróleo cayó hasta los 80 dólares frente a los 107 dólares de media del periodo octubre 2013-septiembre 2014, el impacto fue de cuatro décimas más de crecimiento para España.

Solo en el primer semestre del año, España gastó 8.400 millones de euros menos en la compra de petróleo y gas al exterior con respecto al mismo periodo de 2014, equivalente a un 30% menos. Este ahorro es consecuencia de la brusca bajada experimentada desde octubre del pasado año por el barril de Brent. La cotización de esta materia prima ha perdido casi un 40% de su valor durante el último año, desde los 80 euros que marcaba en el inicio de 2014. Ayer, cerró a 48,50 dólares.

Que el petróleo baje es una buena noticia para España, un país netamente importador que sólo puede cubrir el 0,5% de su demanda con la producción autóctona, por lo que necesitamos importar el 95% de esas materias primas. Una situación que se podría mantener, y seguir siendo favorable a nuestro país si, tal y como prevén los expertos -de hecho, uno de los principales productores del oro negro, como Arabia Saudí, así lo pronostica ya- el precio permanece en torno a los 50 dólares durante los próximos dos o tres años, lo que facilitaría a España seguir saneando su balanza de pagos.

Ahorro en pago de intereses

Pero además, el crecimiento español y, por tanto la buena marcha de la economía, no solo viene empujado por la caída en los precios del crudo. Los bajos tipos de interés gracias a la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), la contención de la prima de riesgo -si bien ha habido un cierto repunte en los últimos meses por la incertidumbre generada ante las próximas elecciones generales, más que por las catalanas del próximo día 27-, y la buena acogida de las subastas del Tesoro español por parte de los inversores, permitirá al Estado ahorrar este año 2.500 millones de euros en pago de intereses de la deuda respecto a lo presupuestado, según fuentes de Economía.

Por tanto, finalmente, la carga de la deuda se quedaría en unos 33.000 millones de euros, desde los 35.490 millones previstos anteriormente. El Gobierno confía que esta rebaja de la carga financiera compense, en parte, la desviación del déficit que van a registrar las comunidades autónomas y la Seguridad Social. La recaudación por cotizaciones sociales no está cumpliendo las previsiones y, según los expertos, su déficit podría acabar el año en torno a los 10.000 millones de euros. Mientras, el Ejecutivo cifra en torno a los 4.000 ó 5.000 millones la menor recaudación del organismo encargado de pagar las pensiones.

En cuanto al cumplimiento del objetivo de déficit este año, si bien es verdad que entre la mayoría de los analistas existe el convencimiento de que no se va a poder cumplir -está fijado en el 4,2% del PIB-, fuentes del Ejecutivo aseguran que se están cumpliendo las previsiones de recaudación y habrá menores gastos como en los intereses de la deuda y en el desempleo, por lo que se podría acabar, «en el peor de los escenarios», en torno al 4,4% del PIB de déficit en 2015.