El socialista Castells avisa de que la secesión de Cataluña es políticamente inviable

El desafío secesionista del Gobierno de Artur Mas ha dado lugar a todo tipo de análisis sobre la viabilidad o la inviabilidad económica de una Cataluña independiente. «Cómo no va a ser viable económicamente cuando lo son Malta, Chipre y Luxemburgo», ha dicho este miércoles el exconsejero catalán de Economía, el socialista Antoni Castells, recordando las diferencias de tamaño entre esos países y la autonomía. «El problema no es ese sino los elevados costes económicos de las tensiones políticas que generaría», ha matizado, dando a entender que sería un proceso inviable «aunque se haga de forma amistosa, pacífica y cordial».

Castells, catedrático de Hacienda pública en la Universidad de Barcelona y miembro del «think tank» EuropeG, ha detallado incluso que, pese a que considera viable la secesión desde un punto de vista meramente económico, «no es en absoluto viable una Cataluña aisladada económicamente».

«Pensar que puede vivir de manera aislada y autárquica y manteniendo los actuales niveles de vida no es viable, exigíria sufrimiento y muchos costes a lso ciudadanos», ha advertido el socialista, todavía militante del PSC pero, según ha confesado el mismo en un encuentro con periodistas, «muy desvinculado del partido y de su dirección y en descuerdo con sus planteamientos».

Propuesta federal

«Es un problema político que solo se puede resolver hablando, necogiando y pactando», ha advertido, llegando a plantear la posibilidad de que mediadores profesionales o la Unión Europea participen en ese diálogo. Castells ha defendido un federalismo con reconocimiento de competencias y la financiación necesaria para asumirlas, similar al de países como Suiza, Canadá y Alemania, y ha recordado que el estatuto de autonomía presentado por el Gobierno tripartito de Cataluña en 2006 planteaba «un encaje de Cataluña en España y una transformación territorial del país». «Era una propuesta que no se desvinculaba de España», ha remarcado.

El economista considera que esa propuesta concreta de federalismo choca con el actual planteamiento del PSOE, que ha insinuado como muy superficial y poco definido. Es más, el socialista ha llegado a decir que esa propuesta de Estado federal es un traje que podría venir grande a muchas autonomías, que no quieren esto, y pequeño a Cataluña». «Entonces podría no resolver el conflicto en caso de que se lleve adelante», ha dicho.