El equipo del «Gitana 17» trabaja a todo ritmo para volver a por el Trofeo Jules Verne

Jugando al gato y el ratón, el pasado 25 de noviembre los super maxi trimaranes «Gitana 17» y «Sodebo Ultim 3» cruzaban la línea de salida en Ouessant con media hora de diferencia a por el récord del Trofeo Jules Verne, vuelta al mundo a vela sin escalas ni ayuda externa, dirección este dejando por babor los cabos de Buena Esperanza (Sudáfrica) y Hornos (Chile); registro que a día de hoy está en posesión del «IDEC Sport» (40 días, 23 horas, 30 minutos y 30 segundos) desde 2017.

A unas 200 millas, el 26 de noviembre de 2020, al norte de las islas de Cabo Verde el timón de babor del «Gitana 17» sufre un impacto de un objeto flotante. Saltan las alarmas y los patrones a bordo del trimarán, Franck Cammas y Charles Caudrelier, toman la decisión de retornar a puerto antes de proseguir.

En contacto con su equipo de tierra informan de la avería y que iniciaban ruta de retorno. El navegante en tierra Marcel van Triest les dice a los patrones que tendrá que dar un gran rodeo por el oeste de las islas Azores para poder llegar si mayores contratiempos a Lorient porque al norte de su posición se estaba formando una baja presión con fuertes vientos de hasta 50 y 60 nudos de intensidad y olas con alturas entre 6 y 7 metros.

Seis días más tarde el «Gitana 17» amarraba en el puerto de Lorient donde el equipo de tierra esperaba para empezar con las reparaciones. Nada más atracar Charles Caudrelier valoraba la actitud de la tripulación: "La mentalidad dentro de la tripulación es positiva. Hemos detectado un problema desconocido. En positivo, el Maxi Edmond de Rothschild no está muy dañado por lo que las reparaciones serán relativamente rápidas. En el mar, observamos una diferencia considerable en el rendimiento después de nuestros daños y ciertamente nos perjudicaron, así que en este sentido la decisión fue bastante simple. El tiempo establecido por la tripulación de «IDEC Sport» (40 días, 23 horas, 30 minutos y 30 segundos) va a recibir algunos golpes y el más mínimo hándicap es un verdadero problema si vamos a tener una oportunidad de superarlos. Eso realmente inclinó la balanza, especialmente porque el clima que se avecinaba no se veía excelente para nosotros y eso parece ser como las cosas están pasando. Otro punto muy positivo sobre este primer intento es la experiencia que ganamos haciéndolo. Todavía nos falta tiempo de navegación y esta semana en el modo de regata y entrega ha sido muy beneficioso, ya que no encontramos condiciones tan intensas en el entrenamiento. El barco zarpará de nuevo con un mayor grado de fiabilidad, ¡y la tripulación será más fuerte! Tenemos esta enorme oportunidad de poder tener otra oportunidad en el tiempo de récord y hoy nuestros pensamientos se van a nuestros amigos en la Vendée Globe que no tendrán esta misma posibilidad. ¡Sabemos lo afortunados que somos, sólo tenemos que ser pacientes!".

Las tentativas de romper el récord Jules Verne tienen la ventaja que se puede intentar en todo momento cuando las condiciones meteorológicas son favorables para partir. En este caso «Gitana 17» tendrá una segunda oportunidad, lo mismo le sucedió al «IDEC Sport» que retorno al punto de partida porque las condiciones meteorológicas no le fueron favorables cuando se aproximaba al paso del Ecuador.

Mientras una parte del equipo Gitana trabaja a todo ritmo en el barco, los implicados en el análisis meteorológico con Marcel van Triest al frente analizan la máxima información meteorológica a la caza de la “ventana” favorable.