Se murió la gallina de los huevos de oro

Por fin ha llegado alguien coherente a la Federación Española de Vela y ha puesto un poco de orden en esa caja desastre que había organizado Gerardo Pombo. El estamento federativo ha vuelto. afortunadamente para todos, a la época de Arturo Delgado en el aspecto de la remuneración del presidente.

Han pasado 12 años de Pombo y tres de Rodríguez Santos en los que el presidente era uno de los afortunados que vivían de los regatistas. La Asamblea, que es la que manda, consintió que los presidentes se colocaran un sueldo, ¡Y qué sueldo! Las territoriales, un nido de vividores que no aportan casi nada a la vela española, consintieron el sueldo del presidente y del Secretario General a cambio de las condonaciones de las deudas y de otras muchas prebendas, que ahora parece ser que Julia Casanueva va a acabar con ellas.

Para Pombo, uno de los vividores más claros de la vela española —no recuerdo desde qué año está en la Federación, pero creo que desde que llegó Arturo— ha sido un modo de vida, pues no se le conoce otra manera de ganársela que chupando de la teta de la vela.

Cuando dio el paso y se presentó a candidato a la presidencia, ganando caciquilmente a Arturo Delgado por un voto, ya lo tenía todo pensado. Cambió los estatutos para poder gobernar después de haberlo hecho durante ocho años y se marchó haciendo malabares para encontrarse con la dirección del Campeonato del Mundo de Santander, a la que accedió por el «artículo 34», es decir, porque él lo dictaminó así.

No contento con esto, cuando la vela le obligó a salir del puesto de director, con dos pelotas, se marchó a Magistratura para que le indemnizaran por el despido improcedente. Ver para creer, señores.

Después de esta gran noticia que ha saltado a la palestra no hace mucho, la Federación Española debe ser valiente y sacar a la luz quienes son los deudores, que por lo que estamos viendo son las Federaciones Territoriales. Los Zalvide and company, que llevan en sus poltronas no se sabe el tiempo deben de ser desenmascarados delante de la vela española. Hay que acabar de una vez por toda con estos reinos de Taifas, que no hacen otra cosa que perjudicar a los deportistas.

No hace mucho me contaba un regatista andaluz que se sentía amenazado por la Federación Andaluza, que era la que ponía y quitaba a los deportistas en el equipo preolímpico y que si no tragabas con aquella «camorra» no tenían nada que hacer. Pues bien, Sra. Casanueva, levante de una vez por todas las alfombras de «nuestra casa».