El Nápoles, de Maradona a Higuaín

De Maradona a Higuaín, el Nápoles revive los sueños 26 años después. El popular equipo del sur de Italia, arquetipo del caos y el sentimiento de la ciudad con el tráfico más catastrófico de la historia, alza el mentón frente al poderoso norte y manda en la clasificación de la Serie A. Dos puntos de ventaja ante la Juventus y el Inter al cierre de la primera vuelta. Los goles del exmadridista Higuaín lanzan a los napolitanos.

Nápoles es un fascinantes marasmo de bocinas, coches y fabulosas pizzerías artesanas que se deslizan entre estrechas calles del centro y calzoncillos colgados de las ventanas. La ciudad tiene varios símbolos: la sangre licuada del patrono San Jenaro, el Vesuvio que amenaza con su sacudida desde el sur, el estadio de San Paolo (al otro lado de la urbe) y Diego Maradona, el astro que lo fue todo el campo y se consumió por la cocaína y la soberbia.

El Nápoles solo ha ganado dos veces la liga en Italia, frente a la tropecientas de la Juventus de Turín (símbolo del poder del norte del país) o el Inter de Milán. Las dos (1987 y 1990), con Maradona sobre el campo capitaneando esa hermosa elástica azul cielo del conjunto napolitano.

Maradona convirtió a una sociedad sin pedigrí para los títulos (algo así como un Betis o un Español) en referencia para Europa. La zurda mágica del argentino, que estuvo acompañado por el brasileño Careca, llevó al Nápoles a la cúspide.

Otro argentino, aunque no con tanta jerarquía, Gonzalo Higuaín, hace soñar a los napolitanos. Ha marcado ya 18 goles en la primera vuelta de la liga, una barbaridad para el estilo táctico de este campeonato. Es el máximo goleador europeo junto a Aubameyang, el delantero del Borussia de Dortmund. Y Nápoles confía en él para reeditar los tiempos gloriosos de Maradona.