Fórmula 1 | GP RusiaLa maldición persigue a Hamilton

Una maldición persigue al campeón del mundo de Fórmula 1. Hamilton está gafado este año. Nada le sale bien. No ha ganado ninguna de las tres carreras disputadas y lo tiene difícil en la cuarta, Rusia, ya que saldrá décimo y lejos de la cabeza. El inglés no pudo concursar en la última tanda, la Q3, por un problema en su motor Mercedes y le dejó el campo libre a su compañero Nico Rosberg, que logró la pole fumando, sin oposición. Alonso saldrá decimocuarto y Carlos Sainz, undécimo.

La irrupción de Fernando Alonso en la Q1 recordó los motivos por los que la F1 fue un deporte de masas en España. De repente, se colocó séptimo olvidando el año catastrófico en McLaren, los progresos sin consumar de Honda y el retraso general de verle donde procede: luchando con los mejores.

Ya no sufren los McLaren para pasar de ronda los sábados, sino que lo hacen con soltura y normalidad. Button tampoco tuvo problemas para acceder a la Q2 en una sesión dominada sin ninguna fisura por los Mercedes de Hamilton y Rosberg. También lo hizo muy bien Carlos Sainz, quien desbancó a Alonso de esa séptima plaza provisional.

Fue una visión futurista, ya que en la Q2 tanto Alonso, como Button y Sainz fueron eliminados por los pilotos y coches más rápidos. Mercedes, Ferrari, Williams y Red Bull son de momento más veloces que el McLaren. La distancia ya es mínima, una décima con los Red Bull, pero suficiente. Alonso saldrá decimocuarto, Button decimosegundo y Sainz undécimo.

La pole le salió barata a Rosberg, ya que su principal competidor, Hamilton, no participó en la ronda. Hizo un gran tiempo el alemán a mitad de la sesión y lo dejó ahí, inamovible para la galería (1.35:417), imposible para los Ferrari que persiguen y persiguen. Otra pole de Rosberg, al que todo le va de cara este año. Todo lo contrario que a Hamilton.