Euroliga
Crisis de lesiones en el Real Madrid
El club blanco recibe hoy al Unicaja con solo tres pívots sanos tras la baja inesperada de Randolph
«Parece que nos ha mirado un tuerto y además en la misma posición, la de pívot», se lamentaba Pablo Laso hace unas semanas, cuando se conocía la baja de Ayón. La enésima de la temporada para el equipo blanco. La del mexicano se unía a las ausencias de larga duración de Llull y Kuzmic, al problema familiar de Thompkins y a la lesión de hombro de Randolph . Un agujero que el Madrid trató de resolver hace unos días con el fichaje de Tavares, pero que se agravó de nuevo ayer cuando se confirmó que Randolph –que había regresado ya al equipo– sufría una rotura por estrés en su pie derecho y que es baja indefinida.
La noticia golpeó ayer con fuerza el vestuario del Real Madrid, que atraviesa uno de los momentos más delicados de la temporada. Los blancos acumulan cuatro derrotas en los últimos cinco encuentros y reciben esta noche (21.00 horas, Movistar+) al Unicaja en el WiZink Center con solo tres pívots sanos. «Estamos obligados a dar un paso adelante», apuntaba ayer Laso, preocupado por este nuevo contratiempo.
Agujero en la zona
Desde que comenzó la temporada, el entrenador madridista no ha podido contar ni un solo día con todos sus hombres sanos. El primer golpe llegó en verano con la lesión de Llull durante la concentración con la selección española. La suya es la baja más dolorosa y también la más complicada. El balear trabaja a buen ritmo para recuperar su rodilla y se espera que pueda unirse al grupo después de la Copa del Rey, aunque la principal preocupación del club es que lo haga completamente recuperado para evitar una recaída. Sin él, el equipo ha perdido a un líder. Un tipo capaz de jugarse esa última posesión y ganar los partidos. Con todo, el paso dado al frente por Doncic y la buena temporada de Campazzo han minimizado los daños en esa posición.
Más complicado es el asunto en la pintura. Ahí, solo Reyes –de 37 años– se ha mantenido libre de las lesiones en este tiempo. El resto de pívots han tenido que lidiar con diferentes dolencias que han impedido al equipo coger el ritmo competitivo que se esperaba a estas alturas de temporada. De todas ellas, la de Ayón es la más dolorosa, por su duración –alrededor de cuatro meses– y por la importancia del mexicano en el equipo. Hasta su lesión, era uno de los destacados, capaz de sostener al equipo por dentro sin más apoyo que el Felipe Reyes. Desde que el azteca pasó por el quirófano, el Real Madrid no levanta cabeza y a su baja se unió ayer la de Randolph . Por eso Laso, que hace unos días descartaba un nuevo fichaje, no cierra ahora la puerta a esa posibilidad, aunque las opciones no son muchas.
Mientras llega o no ese refuerzo, el Madrid mirará hacia la cantera . Yusta y Radoncic se repartirán los minutos de Randolph, aunque el club no descarta hacer debutar a Usman Garuba , la perla de la cantera, que a sus 15 años es ya un habitual en los entrenamientos del primer equipo. Su estreno en Sevilla este fin de semana no sería una sorpresa y su continuidad dependería de su valía para hacerse un hueco. Medidas desesperadas para paliar una crisis de lesiones que está lastrando el buen inicio del equipo.
