España, invicta, en semifinales y con el billete al Preolímpico

La selección española de baloncesto femenino se jugaba este jueves un encuentro clave frente a Montenegro por un doble motivo. Por un lado, poder acceder a las semifinales del Eurobasket de Hungría y Rumanía y, por otro, asegurarse una plaza en el Preolímpico. España llegaba como favorita, pero su rival vendió muy cara su derrota y peleó hasta el final del partido, en el que las jugadoras dirigidas por Lucas Mondelo hicieron buena su experiencia y consiguieron sus objetivos tras imponerse por un ajustado 75-74 en un emocionante encuentro.

Las buenas sensaciones que acompañaron a la actual campeona de Europa en este torneo, la única selección que alcanzó invicta los cuartos, no fueron tan claras en el inicio del encuentro ante Montenegro.

Tras un arranque muy parejo, el primer cuarto terminó con mínima ventaja para las montenegrinas (16-17).

Pese a intentarlo, España no logró encontrar variantes a la hora de superar a la defensa balcánica, que no regaló tiros fáciles a sus rivales. España apenas pudo despegarse en el marcador, a pesar del gran partido de Laura Nicholls (16 rebotes) y la inagotable Alba Torrens (28 puntos). Así, al descanso el electrónico dibujó un ajustado 39-37.

Tras el paso por los vestuarios, las españolas se mostraron erráticas. Los fallos se sucedieron en las vigentes campeonas continentales, pero Montenegro no fue capaz de aprovecharlo y también sufrió para mantenerse en el partido. Cuando la ventaja parecía comenzar a estirarse en favor de España, que logró ponerse once puntos por arriba, dos triples seguidos de Montenegro mitigaron la escapada de las españolas. Las de Mondelo no se desesperaron y siguieron metidas en el partido, pero no pudieron mantener la máxima distancia que habían conseguido y el final del tercer cuarto reflejó otra vez una máxima igualdad (55-52).

Aunque Angelica Robinson y Jelena Skerovic se emepeñaron en mantener a flote a Montenegro, la contundencia del ataque de España pareció decisiva en el cuarto decisivo. Sin embargo, la emoción duró hasta el final. Cuando parecía que Jovanovic se vestía de heroína con un triple inesperado que puso a Montenegro arriba por dos (72-74), apareció Anna Cruz para anotar dos puntos y forzar una falta personal que le devolvió la vida a España (75-74). Carácter y ambición le sobraron a la selección española que sufrió pero supo luchar hasta el último suspiro para meterse en la semifinal del Europeo.