Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS)

Juan Pérez Floristán: «Si por tocar en vaqueros los chavales vinieran a la clásica ya lo habríamos hecho»

El sevillano regresa este jueves y viernes al Teatro de la Maestranza para interpretar junto a la Sinfónica el concierto número 1 de Chaikóvski

El pianista sevillano Juan Pérez Floristán ABC

Jesús Morillo

Juan Pérez Floristán (Sevilla, 1993) es a sus 26 años uno de los pianistas españoles de mayor proyección internacional. Ganador en 2015 de concursos del prestigio del de Santander o el Steinway de Berlín, ciudad en la que reside, su presencia en los grandes auditorios internacionales es habitual, habiendo debutado el pasado agosto en el Royal Albert Hall , dentro de los Proms que organiza la BBC en Londres , posiblemente el festival de música clásica más popular del mundo.

El pianista regresa este jueves y viernes a su ciudad natal para actuar en el Teatro de la Maestranza junto a la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS) bajo la dirección de John Axelrod y con un programa íntegramente dedicado a Chaikovski . Del compositor ruso, Pérez Floristán interpretará su concierto número 1, una de las obras más populares del repertorio.

Este es el punto de partida de una conversación con un solista en progresión ascendente , que cuenta con una treintena de conciertos para piano en su repertorio y al que le gusta hacer incursiones en la música de cámara, la interpretación historicista e, incluso, el jazz, que ofrecen la imagen de un músico al que no le gusta ponerse limitaciones.

«Es una responsabilidad tocar este concierto , porque significa algo para mucha gente y una obra que tiene muchas connotaciones, ya que el público tiene versiones muy determinadas muy presentes. Es un honor que confíen en mí para tocarla y una delicia», explica el pianista, que reconoce que la pieza es «uno de mis primeros recuerdos musicales».

«Tengo la inmensa suerte de que a los sevillanos les caigo bien y me siento arropadísimo en la ciudad»

Además, el concierto le supone reencontrarse con la ROSS, una orquesta que lo ha visto crecer, como persona y como músico, y donde «tengo muy buenos amigos. Mi estilo de vida es bastante solitario y uno tiene que lidiar con momentos raros, como hacer tu debut en el Royal Albert Hall, que fue de mucho disfrute, y que no haya nadie para compartirlo después, así que cenas con el director y te vas al hotel. Ese no es el caso en Sevilla , donde viven mis padres y tengo a mis mejores amigos. Tengo, además, la inmensa suerte de que a los sevillanos les caigo bien y me siento arropadísimo pese a llevar viviendo diez años fuera de la ciudad».

Obra popular

El hecho de que este concierto de Chaivkovski sea una obra tan popular y tan grabada supone un reto para cualquier pianista que aspire a la excelencia. Por ello, la aproximación de Pérez Floristán a la pieza no pasa «por simplemente aportar una versión más al concierto, porque eso está condenado al fracaso. Con cualquier obra, mi punto de partida intento que sea la fascinación que me produce intérpretarla, por muy popular que sea».

«Lo fascinante y valioso», añade el pianista, «es presentar un relato , una idea pensada, sentida y transmitida con fuerza al espectador», teniendo en cuenta, además, lo que cada generación y cada intérprete ve en una pieza clásica «en cuya partitura yo puedo coger muchas cosas que otros no han visto».

De hecho, de las tres versiones que hay de este concierto de Chaikovski, Pérez Floristán no ha optado por la tercera, hecha tras la muerte del compositor y hoy más popular , sino por la segunda, revisada por el propio músico ruso. «Esta obra ha tenido una tradición tan monumental e incontestable que han tenido que pasar décadas para que los pianistas se pongan a escarbar en las otras versiones. Yo la he elegido porque es la que me llega más coherente el mensaje y es la que dirigió Chaikovski».

El concierto muestra también el progresivo acercamiento que está realizando este intérprete al repertorio ruso, a compositores como Rajmáninov o Músorgski . «Hay un tipo de obras de arte que sabes de donde viene nada más escuchar dos o tres notas. Pasa con la música española o el impresionismo francés . Además, la base del pianismo de los grandes pianistas es la escuela judio-rusa, que acabaría siendo la judío-americana, con ese control del instrumento brutal. Es un repertorio que un pianista no puede eludir».

«Lo fascinante y valioso en una interpretación es presentar un relato, una idea pensada, sentida y transmitida con fuerza al espectador»

Sobre el desarrollo de la música clásica en España y el hecho de cuente con menos público que en otros países europeos, Pérez Floristán prefiere no dramatizar y analizar la situación. «Las tradiciones y expresiones culturales de cada nación son diferentes por azares históricos . Cuando se dice que en España somos unos tozudos que no sabemos apreciar la música clásica hay que decir que para cambiar eso haría falta una voluntad política intergeneracional y poner en marcha un proyecto a cincuenta años no solo por la clásica, sino por la educación, que lo otro llegaría solo».

Interpretación historicista

Por ello, el pianista rechaza «ese sentimiento racista de que los españoles no disfrutamos de ciertas artes porque no somos capaces de organizarnos. Porque cuando toco en España en pequeños festivales veo una pasión y un público muy entregado ». Al final, añade, es un tema de «educación» no eso que tratan de vendernos de que «si tocamos con vaqueros la Séptima de Bruckner llegaremos a nuevos públicos. Si los chavales vinieran a verla por tocarla en vaqueros, ¿no cree que no lo hubiéramos hecho ya?».

En consecuencia, Pérez Floristán es partidario de introducir la música en la educación , más que en implementar estrategias de marketing. «Se dice que la gente que va a los conciertos ahora tiene cuarenta años, pero hace veinte o cuarenta años sucedía lo mismo, porque hay aficiones que vienen con la edad. Si se nos educa en este tipo de valores, es más probable que cuando la gente tenga cuarenta años venga a ver los conciertos», con la misma naturalidad que otro fin de semana van al teatro o al cine.

Tras el concierto de esta semana en Sevilla, este pianista continuará con su agenda de compromisos en auditorios españoles y europeos , y grabaciones, como las que realizará para el compositor de bandas sonoras Alberto Iglesias . El 13 de marzo Pérez Floristán regresará a Sevilla para ofrecer dentro del Festival de Música Antigua de Sevilla (FeMÀS) un concierto muy especial y que será su primera aproximación a la interpretación historicista .

«Si se nos educa, es más probable que cuando la gente tenga cuarenta años venga a ver los conciertos»

Será junto a la prestigiosa Hoffkapelle München , con la que interpretará el concierto de piano número 4 de Beethoven con un instrumento histórico: un pianoforte , similar a los que utilizó el compositor de Bonn. Pérez Floristán reconoce la vitalidad que el movimiento historicista imprime a las interpretaciones del repertorio clásico, algo que tiene que ver en que es «más reciente y cuenta con menos tradición » y, en consecuencia, «con mayor libertad creativa ».

Además, el repertorio historicista recupera la posibilidad de la improvisación, aunque basado en el conocimiento musicológico de la época. Así, en lugar de que la partitura «sea una Biblia sobre la que no puedes hacer la mínima exégesis», la visión historicista permite «ver la partitura, siguiendo los tratados de la época, como un manual de instrucciones , lo que te da mucha más libertad».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación