El sarcófago dorado de Tutankamón, en una imagen tomada el hoy
El sarcófago dorado de Tutankamón, en una imagen tomada el hoy - AFP

Egipto da un paso atrás en las expectativas sobre las cámaras ocultas en la tumba de Tutankamón

«Quizá hay alguna cavidad, pero son necesarias más pruebas y escáners», dice el nuevo ministro de Antigüedades

Luxor (Egipto) Actualizado: Guardar
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Un pasillo se interna en el suelo de roca del Valle de los Reyes, desembocando en una pequeña cámara que sirve de antesala al sepulcro del faraón Tutankamón, en el que cientos de periodistas -voceros al mundo- fijaban sus ojos esperando recibir finalmente la confirmación «al cien por cien» de que las últimas pruebas de radar y escáner demostraban la existencia de dos cámaras ocultas tras las paredes de la tumba. Sin embargo, y pese a las expectativas «al noventa por ciento» que levantó el Ministerio de Antigüedades egipcio hace tan solo tres semanas, esta vez Egipto ha dado un paso atrás. «Quizá hay alguna cavidad, pero son necesarias más pruebas y escáners», ha señalado el recién nombrado nuevo ministro de Antigüedades, Jaled Al Anany, frente a la tumba más famosa de Egipto.

El sol egipcio caldea un Luxor casi vacío de turistas. Apenas un puñado de extranjeros visita hoy el Valle de los Reyes, que hace diez años llegó a recibir más de cinco mil turistas diarios, organizados en largas colas frente a la decena de tumbas más famosas, como la de Ramsés VI, Tutmosis III o el propio «faraón niño». Enclavada en la arena blanqueada y precedida por un pequeño cartel dorado, la tumba de Tutankamón era uno de los principales reclamos de una ciudad que vive del turismo y que esperaba con ansiedad que la noticia sobre nuevos descubrimientos animara esta decaída industria. «En Luxor no hay otros negocios, la gente solo vivía del turismo. Ahora es casi imposible», explica Hasán, taxista local. A diferencia de El Cairo, donde la mayoría apenas habla inglés en cuanto sales del turístico zoco de Khan Al Khalili, en Luxor muchos dominan hasta tres lenguas, «por el negocio». «El turismo era nuestra forma de vida, pero ahora ya no vienen extranjeros por miedo a los atentados... Y aquí no ha habido, Luxor es muy seguro», dice antes de recordar una de las mayores tragedias vividas en la ciudad, cuando en 1997 cerca de 60 turistas fueron masacrados en el templo de Hatshepsut. En aquel entonces, la ciudad se volvió contra los terroristas, que perdieron toda sombra de apoyo popular y finalmente ese grupo se disolvió.

Atraer turistas

El afán por atraer turistas y rescatar una economía cada vez más moribunda pudo estar detrás de las prisas del antiguo ministro de Antigüedades, Mamdouh El Damaty, cuando afirmó que los secretos de la tumba de Tutankamón serían aclarados «antes de 2016». «Ha habido mucho de márketing», señaló sin embozo a ABC. Y sin embargo, su sucesor pide prudencia y rebaja las expectativas: «Hay argumentos creíbles que merecen ser estudiados», señala, pero pide prudencia en una rueda de prensa en Luxor junto al circunspecto El Damaty.

Los resultados de los dos escáners aireados hasta ahora, muy positivos entonces según el Ministerio, detectaron primero una diferencia de temperatura destacada en una de las paredes de la tumba y más tarde «dos cavidades» tras las paredes norte y oeste, con incluso trazas de «material metálico y orgánico». El experto en radar japonés, Hirokatsu Watanabe, detectó huecos de hasta 2 metros de profundidad, dando al Ministerio una seguridad del «noventa por ciento» de la existencia de estas cavidades ocultas hasta entonces.

Inseguros

Sin embargo, el nuevo ministro Al Anany matiza las declaraciones de su Ministerio y señala que «quizá haya cavidades, quizá haya material orgánico y metálico (…) pero si lo supiéramos seguro, no estaríamos realizando esta nueva prueba», e insiste en esperar a los resultados del nuevo escáner GPR digital, que estudiará el grosor de las hipotéticas paredes que encerrarían estas nuevas cámaras. Las más de 40 pasadas del escáner fueron conducidas ayer por la noche durante al menos diez horas en más de cinco niveles, dejando a los expertos exhaustos y con visibles ojeras. «La calidad de los datos recogidos es muy buena y ya han sido enviados a Estados Unidos. No se tendrán resultados hasta al menos dentro de una semana, y serán analizados por tres equipos de diferentes nacionalidades», señaló uno de los expertos del National Geographic.

«Estos descubrimientos requieren lentos procesos, entiendo que los egipcios lanzaran campanas al vuelo, pero…» señaló a ABC una fuente de esta publicación. Especialmente en una zona como el Valle de los Reyes, plagada de huecos y grietas naturales, que confunden al radar y hacen difícil distinguir elementos arqueológicos de simples quebraduras en la montaña.

A finales de abril la cámara será objeto de un nuevo escáner, esta vez vertical, que atravesará cerca de 40 metros de montaña y dará una nueva visión que «completará el cuadro» cuyos resultados no serán anunciados al menos hasta mayo. «Cuando estemos cien por cien seguros de que hay una cavidad, sólo entonces haremos un agujero, sin dañar las pinturas murales», concluyó Al Anany, aunque, según insistió, todavía es una perspectiva lejana.

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