Un sondeo del PPCV da a Ciudadanos la llave de la gobernabilidad

El escenario tras las próximas elecciones autonómicas, que se celebran el próximo 24 de mayo, se presenta de lo más incierto. Lo único que parece relativamente asentado es que, hoy por hoy, el PPCV perdería la mayoría absoluta – aunque seguiría siendo la fuerza más votada– y que el resto del Hemiciclo quedaría fragmentado en, quizá, hasta cuatro grupos más.

Así lo apuntan todos los sondeos de intención de voto encargados desde las elecciones europeas por partidos y medios de comunicación. No obstante, en las filas populares ha comenzado a cundir la convicción de que podrán conservar la Generalitat, aunque sea gobernando en minoría.

Esa es la conclusión que se extrae del último sondeo que obra en poder del PPCV, y que dibuja dos tendencias: la primera, el freno a la pérdida de apoyos por parte de los populares y el inicio de una lenta remontada.

La segunda, la posible entrada en el Hemiciclo de un actor «secundario» con el que nadie parecía contar hasta la fecha: Ciudadanos.

Según los datos de este sondeo, que en principio no está previsto que vea la luz –el PPCV ya ha encargado la elaboración de un nuevo trabajo demoscópico para seguir la evolución de la intención de voto–, la formación de Albert Rivera, que en la Comunidad liderará (salvo sorpresa) la concejal alteana Carolina Punset, podría incluso tener la llave de la gobernabilidad. Ciudadanos tendría así que decidir entre apoyar a una amalgama de partidos de izquierdas o la continuidad del PPCV.

Ni UPyD ni EU

Según el citado sondeo, el PPCV consolidaría su «suelo» electoral fijado por la encuesta que presentó en octubre su coordinadora general, Isabel Bonig. En aquel estudio, se otorgaba a los populares un mínimo de 41 escaños –la mayoría absoluta está en 50–. Según las fuentes consultadas, en la última proyección de voto se consolida el escaño número 42, por lo que el PPCV solo necesitaría ocho más para seguir gobernando.

Al margen de que el sondeo apunte a un leve incremento en la intención de voto a los populares –partiendo de la base de que existe todavía una gran bolsa de indecisos, la mayoría votantes tradicionales del centro-derecha–, también se dibuja un escenario en el que el tripartito «clásico» sería imposible: el PSPV y Compromís sí obtendrían representación, pero Esquerra Unida (EU) se quedaría fuera.

La coalición de izquierdas que lidera Ignacio Blanco sucumbiría así, según dicho sondeo, al «efecto Podemos», que le arrebataría buena parte de su apoyo –en las europeas EU obtuvo unos muy buenos resultados en la Comunidad, por delante de Compromís– para alejarla del listón del 5% que otorga presencia en las Cortes. De hecho, Podemos ( que ni siquiera tiene aún candidatos) se disputaría con el PSPV el ser la segunda fuerza en representatividad en el Hemiciclo. Las dos formaciones se moverían en el entorno de los 20 escaños, aunque con una ligera ventaja para los socialistas. En cuanto a Compromís, obtendría entre ocho y once escaños.

Tampoco entraría en las Cortes UPyD, que antes de las europeas se perfilaba con fuerza como el quinto en discordia junto al PPCV y el tripartito. Los problemas internos de la formación magenta –con fugas en masa, precisamente, a Ciudadanos por el rechazo a la forma de dirigir el partido de Rosa Díez– pasarían así factura a la candidatura del mediático Toni Cantó, que también se quedaría fuera del Hemiciclo, siempre según el citado sondeo.

250.000 votos

En cambio, Ciudadanos aglutinaría la mayor parte del voto minoritario de centro-derecha y centro-izquierda desencantado con el PPCV y con el PSPV, lo que le permitiría entrar en las Cortes con un mínimo de cinco y un máximo de hasta siete diputados, según los datos del sondeo. Es decir, podría llegar a darse el caso de que los populares y la formación de Rivera sumasen los 50 escaños.

La dirección del PPCV se ha marcado el reto, en cualquier caso, de recuperar 250.000 votos de los que se perdieron en las europeas, lo que permitiría acercarse aún más a la mayoría absoluta, aunque no alcanzarla.