El mayor espectáculo del campo

Dicen que la primavera la sangre altera y que, en mayo, los asnos suspiran reciamente por las asnas. Pero en el caso de los ciervos de la provincia, es en el mes de septiembre y octubre cuando sienten la llamada de la naturaleza. Es en este momento cuando llega el momento de la berrea, en el que los machos reclaman las hembras para sí, cuando se baten en la lucha sin cuartel de la naturaleza por el amor y la dominación. Y conforman uno de los espectáculos naturales más bellos de la provincia y que, hasta finales de octubre, puede ser contemplado en el parque de Los Alcornocales, siempre con visitas organizadas.

Tugasa, la red de alojamientos rurales de la Diputación de Cádiz, organiza incursiones en el bosque para asistir a este ritual. Desde el Castillo de Castellar, acompañado de guías, podrá observar este gran espectáculo de la naturaleza. Hasta el 15 de octubre realizarán salidas por el Parque Natural de los Alcornocales para disfrutar del acontecimiento, convirtiendo la visita al parque en un espectáculo irrepetible. Además, el Complejo Rural Tajo del Águila también tiene ofertas de alojamiento para el fin de semana del 4 al 7 de octubre y, hasta 9, actividades y visitas guiadas en el Tajo del Águila, Algar y Los Alcornocales, con la berrea del ciervo como temática principal.

Además, la Asociación de Senderismo Vulpes en colaboración con Delegación de Turismo de la Villa de Los Barrios organiza una excursión con acampada para mañana, por un precio de 20 por persona. Incluye rutas por el bosque de unas dos horas con monitores, un seguro y el desayuno. Los participantes deberán llevar sus propias tiendas de campaña, aunque en caso de no disponer de ellas pueden ponerse en contacto con la entidad con antelación para hacérselo saber y buscar una alternativa.

Los ciervos, más conocidos en la zona como venados, cuentan en Los Alcornocales con una población de en torno a los 35.000 ejemplares, que cuando acaba el verano se baten en una lucha sin cuartel por las hembras. Son muy apreciados en la zona de la Sierra para la caza mayor y empleados en la gastronomía. La berrea comienza con los bramidos y continúa durante varios días con la batalla en la que chocan sus astas hasta quedar exhaustos. El sonido envuelve el corazón del parque y sus ecos se escuchan en un entorno de varios kilómetros, especialmente al amanecer y también cuando cae la tarde.