La alta velocidad acorta distancias

La apertura parcial de 32,5 kilómetros de alta velocidad entre el aeropuerto de Jerez y la localidad sevillana de Las Cabezas supone un paso de gigantes para la culminación de la línea entre la capital hispalense y Cádiz. Quizás, lo más importante e interesante de este estreno sea el empujón aportado en un solo año a una obra que ha sufrido dos importantes parones por los ajustes en obra pública impuestos por el anterior Gobierno socialista. Ambos frenazos tuvieron lugar entre 2010 y 2011. El trazado de alta velocidad se ha reactivado tras la llegada al poder de Mariano Rajoy, en noviembre de 2011. El Ejecutivo del PP consideró el AVE de Cádiz como una obra prioritaria y la dotó de financiación en los Presupuestos Generales del Estado, lo que ha servido para garantizar su terminación para mediados de 2015. Los trabajos se encuentran en estos momentos al 85% de su ejecución, lo que permiten arañar, con toda probabilidad, unos meses a los plazos previstos por el Ministerio Fomento. De hecho, la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, considera que hay margen para que el proyecto esté acabado a finales de 2014. La alta velocidad entre Cádiz y Sevilla es un proyecto que ha ido cabalgando en el tiempo desde mediados de los años noventa. El soterramiento de Cádiz, inaugurado en 2002, fue el pistoletazo de salida para una obra que ha tenido demasiados altibajos. No es de recibo que se lleven casi 17 años para construir 122 kilómetros. no hay que olvidar que la provincia de Sevilla partía en esta carrera con 28 kilómetros ya abiertos hasta Utrera. Lo peor de esta obra de infraestructura ya ha pasado, es decir, su penetración en la Bahía no ha sido fácil debido a la orografía y, sobre todo, a las poblaciones que afectaba. Sin embargo, este tramo entre Cádiz y Jerez, a falta de Puerto Real, ya está solventado.