Mas frena las urgencias de los independentistas

La carta de Artur Masa a Mariano Rajoy para solicitar el permiso para convocar el referéndum soberanista marca la agenda política en Cataluña, porque Esquerra y la CUP, las dos formaciones independentistas con representación parlamentaria, consideran que Mas debía haberla enviado hace tiempo.

El presidente del Gobierno catalán pidió a ambos calma, tanto en lo que se refiere a la misiva como con el ritmo del proceso soberanista. Una respuesta en línea con la política que practica en los últimos tiempos, ya que un día da a los más soberanistas una de cal y al día siguiente, una de arena; primero insinúa que podría aplazar el referéndum a 2016 y luego señala que el 31 de diciembre de este año ya habrá fecha concreta.

Mas, que intenta llevar la iniciativa y trata de que no lo haga Esquerra, confirmó ayer que enviará la petición formal a la Moncloa en las próximas semanas, y que si no lo ha hecho antes es porque está a la espera del resultado de dos informes, uno del consejo asesor para la transición nacional sobre las vías legales para convocar una consulta y otro sobre las conclusiones del pacto nacional sobre el derecho a decidir celebrado la semana pasada. Textos que quiere incluir como documentos adjuntos a la carta.

Rajoy se marchará de vacaciones en agosto con el texto de Mas, cuya respuesta puede radicalizar o no el nacionalismo catalán y caldear uno de los primeros actos políticos de la vuelta del periodo estival, la Diada del 11 de septiembre, que se prevé multitudinaria como el año pasado, cuando se celebró la gigantesca manifestación soberanista que abrió la espita al proceso posterior. Los movimientos soberanistas, por lo pronto, preparan para este año una cadena humana que recorra Cataluña de norte a sur.

Mientras, CiU y ERC van completando etapas de la hoja de ruta hacia la consulta y la comisión parlamentaria del derecho a decidir, en la que también participa el PSC, se constituye hoy.