EL REMATE DE

ENVIDIA SANA

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El equipo de una ciudad (Málaga), reinventado hasta en tres ocasiones. Paseándose con orgullo y buen fútbol por toda Europa. Derrotando a Milán, Oporto., que sana envidia. Pasaron las penurias de otros clubes por Tercera y Segunda B. Ahora lucen sus mejores galas por Europa. Descendimos de la mano en Primera en la temporada 05/06 y sólo hay que ver donde está cada uno. ¡Como para no sentir envidia! Menudo cambio han dado las cosas. Los malaguistas vuelan alto y los cadistas, de mal en peor. Los malagueños han superado un proceso concursal del 2006 hasta hoy con una buena gestión económica y deportiva. Llevada a cabo por un exjugador, Fernando Sanz. Lo colocó en Primera, se lo vendió al jeque y llegó Pellegrini.

Caminos bien distintos en apenas seis años. El pasado martes todos fuimos un poco malaguistas y sentimos su desgracia como nuestra. Lloró Málaga y lloró todo el fútbol español. La crueldad de su derrota me recordó a la del Alavés en la final de la UEFA de 2001 contra el Liverpool. Algunos la recordarán. 5-4 en la prórroga con gol en propia puerta. La derrota del Málaga viene motivada por la incapacidad de cinco árbitros para ver dos fueras de juego escandalosos. Lo del quinto árbitro es de cachondeo. Menuda figura se ha inventado Platiní. ¿Cuál es el papel de estos árbitros tras la portería? Nadie sabe muy bien que pintan. Que sucedan estas situaciones a nivel máximo de fútbol europeo es para echarse las manos a la cabeza. Es imposible que ese quinto árbitro no haya visto tan clamoroso fuera de juego. De traca, indignante. Los sueños de toda una ciudad por los suelos. Al menos, en Málaga, han tenido la posibilidad de soñar. En Cádiz, de momento, tenemos pesadillas. Está lejos poder vivir algo parecido. Aunque la afición amarilla no necesita tanto. Se conforma con bien poco para recuperar la alegría. Sólo nos queda felicitar al Málaga por la imagen dada.

De momento, en Cádiz, envidiamos su situación y sus sueños.