El Domingo de Ramos, salvado

San Fernando

Miles de isleños acudieron al centro de la ciudad para contemplar el recorrido de los cortejos procesionales del Domingo de Ramos. Cada año son más los fieles que acuden a San Fernando para vivir una de las semanas más importantes de su calendario. Así lo demuestra cada año en el que crece una devoción que comienza en La Salle. La Cruz de Guía de la Borriquita fue de nuevo la encargada de anunciar la fiesta más solemne de La Isla. Precisamente el estreno más destacado de esta jornada se encontraba en la túnica del Cristo de la Borriquita, que además realizaba una estación de penitencia especial, puesto que este año celebra su 50 aniversario fundacional. Por ello su salida fue especial, aunque ya lo es cada año. Los hebreos llenaron de color las calles, mientras que el barrio de las Siete Revueltas fue de nuevo uno de los lugares más especiales de su recorrido ante la gran afluencia de gente que esperan allí para captar los momentos de mayor fervor.

Un sentimiento que comparte la barriada so y destaca por tener uno de los recorridos más largos de la jornada.

Y si Humildad Paciencia es de los más jóvenes, Columna es una de las más consagradas. La imagen del paso de misterio con los sayones blandiendo los espinos y la espalda ensangrentada del Cristo abriéndose paso por una multitudinaria plaza de la Iglesia, es uno de los momentos más esperados de la Semana Santa, al tratarse de uno de los misterios más impresionantes por sus dimensiones. Estrenó faldones de terciopelo azul con broches dorados. Si el tiempo lo permite hoy será el turno para Medinaceli, Estudiantes y Ecce-Homo, la procesión que abre una Semana Santa especial dentro de La Isla, la que se vive en el barrio de La Pastora.

Chiclana

Salió el sol el Domingo de Ramos para dejar a la lasaliana hermandad y cofradía de Nazarenos de Jesucristo Rey en su 'Entrada triunfal en Jerusalén', 'Santo Crucifijo' de la Salud, Nuestra Señora de la Estrella y San Juan Bautista comenzar a lo grande la Semana Santa chiclanera. A ello también contribuyeron las filas de niños y niñas vestidos de hebreos que abrieron la jornada con las tradicionales palmas que comenzaron a salir de la Capilla de La Estrella (colegio La Salle), justo después de que lo hiciera la cruz de guía a las cinco de la tarde.

Como primera cofradía de la Semana Mayor, fueron cientos de personas las que se llegaron hasta la capilla para ver la salida de la procesión, que después siguió su desfile bajando la cuesta Hormaza y continuó su recorrido hasta llegar a la Carrera Oficial, sobre las siete y media de la tarde. A la salida, fue también la primera de las corporaciones que cambió su itinerario para bordear la calle Constitución que se encuentra en obras. Para ello, La Borriquita abandonó la calle La Plaza por Joaquín Santos, para después dirigirse a Vega y Corredera. Como cada año, la recogida de la hermandad lasaliana fue uno de los momentos más emotivos de su salida, motivo por el cual desde Hormaza volvió a juntarse un multitudinario público alrededor de las diez de la noche y hasta que el Himno de España cerró las puertas de la Capilla de La Estrella, con sus titulares ya dentro.

Este año, La Borriquita no mostró estrenos en su salida y también conservó sus ya tradicionales acompañamientos musicales: la agrupación musical chiclanera Las Angustias para el misterio y la Asociación Musical Álvarez Quintero, de Utrera, para el palio. Como ya viene siendo habitual, una representación de la banda de Chiclana realizó una ofrenda floral a los titulares en la mañana del Domingo de Ramos.

El Puerto

El Puerto, donde desde primera hora de la mañana se advirtió que el cielo daría la tan deseada tregua. Los cofrades, eso sí, tuvieron que pertrecharse de prendas de abrigo para protegerse del frío viento que acompañó a la hermandad de Nuestro Señor Jesucristo en Jerusalén y Nuestra Señora de la Entrega y a la Flagelación. Las inmediaciones de la parroquia de El Carmen y San Marcos se llenaron de público expectante en un anhelo colectivo por ver en la calle la primera cruz de guía de la Semana Mayor portuense. No se hizo demasiado de rogar y en torno a las cuatro de la tarde se abrieron las puertas del templo para dar comienzo a la primera hermandad del Domingo de Ramos de El Puerto. Aproximadamente cuatrocientos nazarenos conformaron el cortejo, que contó con los acompañamientos musicales de la agrupación musical San Juan, de Jerez, y de la banda de música San José Artesano, de San Fernando.

La Borriquita es una de las pocas hermandades que este año presentará estrenos. Así, se pudo ver la segunda fase del tallado, con las cuatro esquinas, del paso de misterio. También se han incorporado cuatro candelabros y una imagen secundaria, la talla de un hebrero, obra de Ángel Pantoja. La recién restaurada imagen de Nuestra Señora de la Entrega, cuyo palio lució un crespón negro por el fallecimiento de alguien vinculado a la hermandad, se encontró con sus devotos por primera vez.

La Flagelación, que salió de la parroquia de San Joaquín en torno a las cinco de la tarde, ha seguido la tendencia general de la austeridad en el gasto y no ha presentado ninguna novedad en sus pasos. La salida estuvo marcada por el cambio de dirección: en lugar de tomar Cielo hacia la plaza de España, tomó en el sentido contrario, hacia el convento del Espíritu Santo, como un gesto hacia sus hermanas. El paso de misterio estuvo acompañado por la banda de cornetas y tambores María Magdalena de Jerez; y el palio de la Virgen de la Amargura, por la banda de Carrión de los Céspedes. Hoy, Lunes Santo, tan solo la hermandad de Los Afligidos hará estación de penitencia. Saldrá a las 19.15 de la tarde, de la iglesia de San Juan de Dios, en Micaela Aramburu.

Arcos de la Frontera

La lluvia amenazaba con arruinar la primera de las procesiones de este año en Arcos. Pocos minutos antes de que La Borriquita emprendiera su procesión dos tormentas hicieron temer lo peor a sus devotos, pero el cielo se abrió para que las palmas tomaran el Barrio Bajo. Cristo Rey volvía a las calles de su barrio para alentar a las familias que lo están pasando mal y la Virgen de la Fuensanta para arropar a sus vecinos.

Los romanitos, una centuria de niños, se llevaban las primeras miradas de un desfile procesional en el que el sol se hizo hueco entre las nubes. Con paso firme portaban los costaleros a Cristo en su entrada triunfal al Jerusalén arcense, el Barrio de María Auxiliadora, donde los niños se acercaban al él con cariño, continuando con la devoción y tradición que les inculcan sus mayores. A la Fuensanta la portaban unas valientes costaleras por su barrio. La Semana Grande de Arcos ya estaba en marcha.

El día avanzaba y la Pasión se trasladaba de barrio para adentrarse en la zona histórica de Arcos y el centro. Llegaba el momento del Prendimiento, que retrasó su salida media hora, hasta las siete y media de la tarde por un peligro de lluvia que al final se quedó en amenaza. Su Cruz de Guía salió de la Basílica Menor de Santa María de la Asunción y pocos minutos después ya se podría disfrutar con una espectacular bajada de las Gradas que era la prueba palpable de la hermosura de este paso de misterio en el que Cristo es entregado por una bolsa de monedas.

Los arcenses buscaban los rincones y huecos más recónditos del casco antiguo para disfrutar del buen hacer de la cuadrilla de costaleros y sentir el aliento de este grupo de jóvenes que pasean con devoción y entrega al Cristo de los Estudiantes. Con túnica de color marfil y las manos por delante, la hermosura del Cristo del Prendimiento fue la primera en fusionarse con la belleza de la monumentalidad arcense. Esta localidad es la única de la Sierra que cuenta con procesiones cada día de la Semana Santa y de hecho hoy, Lunes Santo, sale en procesión Las Tres Caídas, siempre que el tiempo lo permita, a partir de las 19.00 horas.