El fenómeno Blue Jeans llega a Cádiz

No le molesta en absoluto que le llamen el 'Moccia español', pero advierte de que su literatura, sus temas, tramas y personajes son muy diferentes al del superventas italiano. Precisamente en eso es lo que coincide Francisco de Paula Fernández con el autor de 'Perdona si te llamo amor', en que su obra se ha convertido en un 'boom' literario en nuestro país. El escritor sevillano que se esconde bajo el seudónimo de Blue Jeans acaba de publicar la segunda parte de '¡Buenos días, princesa!' titulada 'No sonrías que me enamoro', libro del que ayer firmó ejemplares en la librería gaditana Quorum.

La incursión de este joven que estudió Periodismo en el mundo de la literatura juvenil comenzó en verano de 2008 cuando escribió el primer capítulo de 'Canciones para Paula' en la web Fotolog. El boca a boca y las redes sociales hicieron el resto. Una primera trilogía con más de 300.000 ejemplares vendidos y el fichaje por Planeta vinieron después. Blue Jeans trabaja con esta editorial desde la publicación en 2012 de '¡Buenos días, princesa!', el inicio de otra serie de tres libros en el que el autor ha cambiado los chicos guapos y perfectos por el club de los incomprendidos. Por lo demás, se repiten los ingredientes que cuaja en éxito cada obra de Blue Jeans. «Trato de mantener enganchado al lector con capítulos cortos y un ritmo ágil. Escribo sobre temas muy actuales que concierne a la gente joven. De los cinco libros que he escrito, éste es el más arriesgado en tanto en cuanto he hablado de temas tabú en la literatura juvenil», cuenta el escritor. Francisco de Paula se inició en la escritura con las novelas de misterio, pero como él mismo cuenta, fue rechazado por las editoriales. Sin embargo, sus historias románticas se convierten en bestsellers en nuestro país. «Es verdad que la mayoría de lectores son chicas de entre 13 y 18 años, pero cada vez más nos leen universitarias o madres de las chicas que vienen a la firma de libros», explica Blue Jeans. A pesar de su abrumador arranque literario, el sevillano es consciente de lo mucho que le queda por mejorar y aprender. «Seguiré hasta donde me dejen, es mi oportunidad y no será por esfuerzo y dedicación».