Los efectos de la reforma laboral

La nueva reforma laboral cumple a mediados de este mes su primer año de vida y, por ahora, no ha tenido los efectos deseados. El texto se redactó con la absoluta convicción de que ayudaría a generar empleo pero, el resultado, ha sido todo lo contrario. Los expertos reconocen que la reforma ha servido para flexibilizar el mercado de trabajo y sentar las bases ahora de lo que serán en un futuro las relaciones laborales. Es decir, estamos en el inicio de la norma y no se puede evaluar el papel de la reforma al cien por cien. La patronal gaditana ha reconocido que gracias a su aplicación se han salvado numerosas empresas que arrastraban graves problemas de financiación y, sobre todo, de actividad. No hay que olvidar que el consumo ha caído en picado. El nuevo marco laboral flexibiliza el despido, reduce las indemnizaciones, rebaja el trámite y dinamiza los tipos de contratos. Estos son los grandes pilares de un texto que está llamado a generar empleo, una vez que la situación mejore. Los empresarios la defienden, algunos de ellos incluso son partidarios de ampliar su articulado, aunque insisten en que su efecto positivo se podrá apreciar en el mercado laboral, una vez que los bancos abran el grifo del crédito. Los negocios necesitan dinero para expandirse y la única fuente que lo puede aportar es la banca. Mientras tanto, la reforma laboral seguirá siendo una herramienta para favorecer los despidos ante la imposibilidad de crecer.