Los bancos anticipan la salida de la crisis tras limpiar sus balances

El beneficio obtenido por el sector de los bancos grandes y medianos españoles, tan solo 1.876 millones en el ejercicio 2012, implica un fuerte descenso del 81% respecto al ejercicio anterior, y es el reflejo de las dificultades de una actividad fuertemente sacudida por la desconfianza de los inversores, en la que solo los grandes grupos han podido sacar partido de su presencia exterior. Nada que ver con las ganancias de hasta 16.900 millones que los grandes y medianos llegaron a totalizar en 2008. En el pasado ejercicio, los gigantes del sector salvaron los muebles por su negocio exterior, mientras que entidades limitadas al mercado nacional han logrado captar por sus propios medios los recursos de capital necesarios, y ahora dirigen sus estrategias hacia una etapa de transición, con la vista puesta en la salida de la crisis.

Las ganancias agregadas de Santander, BBVA, CaixaBank, Popular, Bankinter y Sabadell, bancos todos ellos que han salido a flote sin necesidad de ayudas públicas, se han alcanzado tras dotar la excepcional cuantía de 46.000 millones en provisiones. Pero cada una de las entidades muestra una peculiaridad. Mientras los dos gigantes bancarios obtuvieron fuelle de su presencia en el exterior, Popular sacrificó el beneficio para proceder al reforzamiento del capital, y La Caixa volcó sus esfuerzos en digerir las compras que le han alzado al primer puesto en el ranking nacional de la banca.

Retrocede el beneficio

El BBVA sacó en 2012 el 'extintor' de las provisiones inmobiliarias al dotar «todas» las que le restaban de una sola vez -4.437 millones solo para eliminar posibles contingencias en el 'ladrillo' que obra en sus libros, cuatro veces más que entre 2010 y 2011-, lo que hizo que su beneficio neto anual se redujera un 44,2% hasta quedar en 1.676 millones.

Tras esta 'limpieza' de riesgos, el presidente del banco, Francisco González, dijo ayer durante la presentación de sus cuentas que este año esperan «dar la vuelta» a sus resultados en España -el último ejercicio supusieron unas pérdidas de 1.841 millones-, hasta el punto de que vuelvan a aportar ganancias y que su contribución al negocio del grupo llegue alcanzar entre el 23% y el 25% en dos años. Para ello se aprovecharán también de que estiman que la crisis nacional «toque suelo» a finales de 2013, para «empezar a salir» de ella en el primer trimestre de 2013.

Ganó un 78% menos

CaixaBank, el banco de La Caixa, ganó tan solo 230 millones de euros en 2012, un 78% menos que en el ejercicio anterior, tras destinar a dotaciones y saneamientos de créditos, en su mayor parte procedentes del ladrillo, nada menos que 10.299 millones, sin ayuda financiera europea ni cualquier otro apoyo exterior. Su presidente, Isidro Fainé, y el número dos de la entidad, Juan María Nin, no han hecho gala de estas ganancias en la presentación de las cuentas anuales, sino de la posición de liderazgo en el negocio en España a la que se ha alzado la entidad.

Uno de cada cinco españoles tiene a La Caixa como su banco principal. La adquisición de Banca Cívica (Caja Navarra, Canarias, Burgos y la sevillana Cajasol) y la más reciente de Banco de Valencia le han afianzado en esta posición. Ser el más grande tendrá su premio cuando la recuperación económica sea una realidad.

Saneamiento intenso

Banco Popular cerró 2012 con unas pérdidas contables que suman 2.461 millones de euros, tras concentrar en el ejercicio pasado todas sus medidas de saneamiento y realizar un esfuerzo en provisiones de 9.600 millones a fin de disipar de una sola vez los riesgos asociados a sus activos problemáticos y cumplir las nuevas exigencias regulatorias. Ese resultado negativo contrasta con el beneficio de 483,97 millones que la entidad registró en 2011.

Según las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, la entidad que preside Ángel Ron habría obtenido un beneficio neto de 520 millones excluidos los 4.258 millones de euros correspondientes a los saneamientos extraordinarios exigidos por el Gobierno. El Popular es ahora la entidad con mayor cobertura en su exposición al inmobiliario tras incrementar la cobertura global de morosos hasta el 65% y la cobertura de morosos fallidos hasta el 74%.