Japón lanza un masivo plan de estímulo para su economía

El primer ministro japonés, Shinzo Abe, lanzó ayer un plan de estímulo económico masivo para sacar al país de la crisis crónica que vive y criticó a China, donde las firmas niponas padecen los efectos de un conflicto diplomático bilateral. El jefe del Gobierno conservador, que llegó al poder el mes pasado, presentó un plan de 20,2 billones de yenes (uno 170.00 millones de euros), que incluye tareas de reconstrucción en el noreste del país, devastado por el sismo y el tsunami del 11 de marzo de 2011, y un aumento del gasto militar.

El objetivo es estimular el crecimiento de la tercera economía del mundo y atajar la deflación, que perjudica el consumo y la inversión y frena la actividad. Los inversores japoneses saludaron rápidamente el paquete. El índice Nikkei 225 de la Bolsa tokiota ganó un 1,4% y cerró en su nivel más alto desde febrero del 2011, antes de la catástrofe de la central nuclear de Fukushima causada por el tsunami. Al tiempo, el yen caía a 89,35 unidades por dólar, su nivel más bajo desde junio de 2010, lo que favorece a las empresas exportadoras.

«Con estas medidas, lograremos un aumento del PIB real del 2%, y se crearán 600.000 empleos», prometió Shinzo Abe al presentar el plan. La economía japonesa se contrajo un 0,6% en 2011 y la cifra del año pasado está aún por publicarse. «Es extremadamente importante acabar con la deflación prolongada y la carestía del yen», declaró Abe, recalcando dos puntos clave de su campaña.

La mitad del plan será gasto público destinado a acelerar la reconstrucción del noreste del país y la restauración de infraestructuras. Hay una partida de unos 1.516 millones de euros para comprar misiles, aviones de caza y helicópteros, para reforzar el ejército en medio de la tensión con Pekín por la soberanía de un archipiélago en el Mar de China Oriental. Abe criticó de paso a China porque, en su opinión, maltrata a las empresas japonesas.