Rajoy acentúa el recorte de las cuentas para eludir el rescate

El año 2013 traerá más recortes de gasto público para reconducir el déficit y conjurar la amenaza del rescate. El Gobierno de Mariano Rajoy aprobó ayer el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 2013, que acrecienta en 13.000 millones de euros el ajuste que la administración central deberá acometer el próximo año para cumplir sus compromisos de reducción del déficit, junto a la Estrategia Española de Política Económica, que pretende sentar las bases para el crecimiento futuro. El año que viene la mayor presión recaerá sobre el gasto, que absorberá el 58% del ajuste (0,77 puntos de PIB) mientras que el 42% restante (0,56 puntos) saldrá del incremento de ingresos.

Los presupuestos de 2013 y el programa de reformas tienen como objetivo asegurar el cumplimiento de la senda de consolidación fiscal, que el año próximo obliga a recortar el déficit del conjunto de administraciones públicas del 6,3% previsto para el cierre de este año al 4,5%. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, detalló que en el caso de la administración general del Estado, el ajuste equivale a 1,34 puntos de PIB, más de 13.000 millones de euros, entre recortes de gastos y subidas de impuestos.

Con esas medidas el Gobierno busca también convencer a los mercados de que España puede salir adelante sin necesidad de un rescate integral de su economía porque es capaz de tomar medidas, por duras que sean, para cuadrar sus cuentas.

En un intento por generar confianza para que los inversores relajen la presión sobre la deuda española, Montoro desveló la marcha de la recaudación. «La previsión se va a cumplir con creces», recalcó el ministro, que cifró en 170.648 millones de euros los ingresos tributarios al final de año, frente a 168.725 millones presupuestados a comienzos de 2012, antes de la subida del IVA. Para 2013 los ingresos tributarios estimados ascienden a 175.177 millones. El incremento previsto es del 3,8% sobre lo presupuestado y del 2,7% respecto de la previsión para el cierre de este año.

El mayor obstáculo para la economía española el año próximo es que seguirá inmersa en la recesión que tiene paralizadas la actividad y el consumo y que ha disparado el paro. El cuadro macroeconómico avalado por el Consejo de Ministros augura una caída del PIB del 0,5% en media anual para 2012, muy por debajo de la que pronostican desde organismos internacionales hasta institutos privados de análisis, y que se sumará al retroceso del 1,5% que sufrirá este año.

Recesión

Una caída «suave», en palabras de Montoro, que explicó que la actividad podía evolucionar «mejor» en la segunda mitad del año pero dejó en el aire si habrá alguna tasa de crecimiento trimestral positiva. El consumo privado sufrirá un retroceso adicional del 1,4% y el de las administraciones públicas se contraerá un 8,2%. La tasa media de paro será del 24,3%, porcentaje que según el ministro sitúa la pérdida de empleo «en niveles similares a 2012».

El gasto del Estado en su conjunto crecerá en 2013 un 5,6%, hasta 169.775 millones de euros. La mayor parte de ese incremento (9.742 millones) corresponde al incremento de los intereses de la deuda, que sumarán 38.590 millones de euros, un 33,8% más. Una subida que Montoro atribuyó no tanto a los elevados tipos de interés que España soporta desde la primavera pasada sino al incremento del volumen de deuda viva. Montoro explicó que el ratio de deuda respecto del PIB supera ya el 75% y se disparará en 2013 por encima del 80%. Eso a falta de saber si computará como deuda la asistencia financiera para el rescate de la banca.

Por el lado del gasto también subirán un 74,9%, hasta 15.554 millones, las aportaciones a la Seguridad Social, porque las prestaciones no contributivas correrán también a cargo del presupuesto del Estado. Descontadas esas dos partidas, de gran peso sobre el Presupuesto, el gasto del Estado desciende un 7,3% y el de los ministerios un 8,9%, hasta quedar «por debajo de los 40.000 millones de euros». La reducción del gasto ministerial presupuestada es inferior que el 12,2% que el propio Montoro anunció cuando aprobó el techo de gasto.

Ajustes adicionales

En cuanto a los ingresos, el Gobierno aprobó un listado de nuevas medidas tributarias con las que espera incrementar la recaudación en 4.375 millones de euros. Medidas que incluyen desde un novedoso impuesto sobre los premios obtenidos en la lotería, subidas de gravámenes a las plusvalías, límites a las deducciones por amortización en el impuesto de Sociedades que pagan las empresas y una prórroga del impuesto sobre el Patrimonio, un tributo cuya reactivación por el anterior gobierno socialista fue denostada por el PP cuando estaba en la oposición. La subida del IVA que entró en vigor el pasado 1 de septiembre debería aportar 7.000 millones más sobre lo presupuestado, según el cálculo oficial.

El ajuste presentado por el Gobierno central no es todo el que sufrirán los españoles en 2012. Queda por ver qué recortes aplican las comunidades autónomas, que estarán obligadas en 2013 a reducir el déficit regional en 0,8 puntos (equivalente 8.000 millones de euros), desde el 1,5% previsto para el cierre de este año hasta el 0,7%. Y son precisamente las autonomías los entes que gestionan las partidas más sensibles para el ciudadano de a pie, como la educación y los servicios sanitarios.

«Cumpliremos el déficit sí y sí, y además esta respuesta está avalada por el cumplimiento del objetivo de ingresos», recalcó el ministro de Hacienda. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, destacó que los presupuestos aprobados son «para salir de la crisis» y resaltó que el gasto social absorberá el 63,6% del presupuesto. Todas las partidas descienden, salvo las de «pensiones, becas e intereses de la deuda», señaló.