Arenas coquetea con un triunfo en Andalucía, pero aparca la euforia

«El cambio ya ha llegado a España, ahora es el turno de Andalucía». El PP no ha perdido ni un día en poner a funcionar de nuevo su maquinaria electoral con vistas a las elecciones autonómicas para las que aún no hay fecha. La frase anterior responde al lema de un nuevo vídeo de los populares dado a conocer ayer por la mañana en la junta directiva regional y que por la tarde ya estaba colgado en 'YouTube'. El vídeo, con la imagen de Rajoy y Arenas como colofón, precedió a la entrada triunfal del líder del PP andaluz en una sala abarrotada de dirigentes de su partido exultantes por los resultados del domingo que le dieron la victoria en Andalucía. Arenas se mostró más que contento, pero de nuevo quiso templar la euforia. «No vamos a tener la tentación de morir de éxito», avisó en clave interna.

El mensaje que Javier Arenas quiere transmitir a los suyos es ambivalente. Por un lado revela datos para generar confianza en que las andaluzas las va a ganar. Datos que «marcan un rumbo hacia una mayoría amplia». Pero también advierte de que queda mucho por hacer.

El PP siempre ha admitido que su asignatura pendiente eran las comarcas rurales, una vez que desde 1995 empezó a conquistar el voto urbano de las capitales y del litoral, donde incrementó su presencia en 41.000 votos el 20N. Pero ha sido en las zonas del interior donde ha experimentado su mayor éxito: 200.000 votos. El PP ha sido la primera fuerza en 37 de los 52 municipios de entre 20 a 50.000 habitantes, explicó Arenas satisfecho. Además de la más votada en 25 de las 29 ciudades más importantes, incluidas todas las capitales. Es decir, asignatura superada en parte, porque Arenas reconoció que hoy perdura cierto margen para el PSOE en las poblaciones de menos de 5.000 habitantes, por lo que pidió a su partido un último esfuerzo en esta Andalucía «profunda».

Aunque al PP le salen las cuentas de la mayoría absoluta - Antonio Sanz informó el lunes de 58 parlamentarios extrapolando los datos de las generales -, Arenas pide cautela y humildad a los suyos. «No creo en las extrapolaciones, lo único que importa son las urnas», dice para contener la euforia. Todavía queda pelea y el PSOE se muestra dispuesto a dar batalla.

Una batalla que tendrá Sevilla como cuartel de preparativos un mes antes de las elecciones. Arenas confirmó que el congreso nacional de su partido se celebrará en Sevilla en la tercera semana de febrero. Griñán también anunció en una entrevista en Canal Sur Radio que el cónclave del PSOE tendrá lugar en la capital andaluza en la segunda semana del mismo mes. Sevilla es la única provincia que se le ha resistido al PP, aunque se ha quedado a sólo tres puntos de los socialistas.Ejemplo de la dura contienda que preparan ambos.

Los dos congresos se vestirán en clave andaluza para reforzar a sus respectivos candidatos. Curiosamente, tanto Griñán como Arenas han coincidido en lanzar mensajes internos para hacer valer el peso andaluz a sus respectivos partidos. Griñán apeló el lunes a que en Andalucía es donde el PSOE ha resistido mejor la oleada del PP.

Arenas recordó ayer que Andalucía ha aportado el 50% de los votos que ha incrementado Rajoy. El líder del PP pudo sacarse la espinita clavada tantas otras elecciones. «¡Cuántas veces hemos oído que no hemos ganado en España por culpa de Andalucía!». Ahora reivindica su poder andaluz como el motor que ha conducido al cambio en España y a Rajoy a La Moncloa.