Y FUERA

ILUSO SOÑADOR

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Hay una regla no escrita en el periodismo deportivo que aflora cada vez que un equipo se comienza a quedar sin opciones de pelear por objetivo alguno. Los temas de actualidad deportiva comienzan a quedarse en un segundo plano de manera inversamente proporcional al número de posibles fichajes que se publican de cara a la próxima temporada. En las últimas fechas se ha levantado la veda y ya ha comenzado el baile de nombres, pero curiosamente nada se habla de lo que sucederá con el banquillo del Xerez Deportivo en el próximo curso.

Y pienso que precisamente esa será la gran papeleta de Emilio Viqueira de cara a la confección del próximo proyecto. El gallego debe buscar un técnico bueno, bonito, barato y que le caiga simpático a la grada de Chapín. Un día escribí que si el técnico catalán se llamara Javiliski Lopeteski todo hubiera sido diferente, y hoy no solo me reafirmo en mis palabras si no que además añado que si llevara el pelo largo, tuviera acento argentino y además se acodara de vez en cuando del Prendi, serían muchos más los que verían en él a un buen entrenador.

Alguno me llamará loco. Y efectivamente puede que peque de iluso soñador pero, para empezar, pienso que el Xerez todavía tiene sus opciones de entrar en el 'play off'. El juego no es lo que me ilusiona, pero estoy convencido de que si son capaces de ganar los cuatro partidos estarán en las eliminatorias por el ascenso -el señor Gutiérrez Corvo incluso afirma que con diez puntos sería suficiente-. Y para terminar, creo que no sería mala idea lo de tener una continuidad en el proyecto y mantener a Javi López al frente del banquillo azulino. Que los mal pensado no se equivoquen. No tengo ningún lazo de unión con el catalán. Es más, no es un técnico con el que haya tenido demasiado 'feeling', pero los precedentes me avalan: cada vez que un proyecto ha tenido continuidad, el Xerez ha tenido premio. No hace falta remontarse demasiado en el tiempo para encontrar un claro ejemplo: la permanencia y el ascenso con Esteban.