Carrasco: «El Industrial está muerto y todo lo que llegue será positivo»

«Ante las adversidades me intento superar y he enviado un correo a tener en cuenta». Dani Carrasco se ha convertido en el azote de la Academia Glenn Hoddle (GHA) ante la mala relación entre el exseleccionador inglés y Juan Manuel Delgado, presidente de la entidad. El futbolista del Atlético Sanluqueño confirmaba ayer que en la noche del domingo envió a Hoddle un correo electrónico avisándole de posibles consecuencias, algo que destacaba ayer el futbolista: «Ellos ya vieron cómo estaba la situación con Ricardo (García), pero ya les he dicho que eso se puede quedar en pañales con lo que les puede pasar, ya que Ricardo al fin y al cabo no es nadie, mientras que Glenn Hoddle tiene mucho trasfondo mediático y no querrá verse afectado por apuntillar a un club como el Jerez Industrial».

En cuanto a las últimas negociaciones con los ingleses, Carrasco comenta que «en el convenio que yo tengo puedo demostrar que lo que la GHA quería es que el club se hiciera cargo de los jugadores, ya que no están en Montecastillo, recogerlos a las nueve de la noche en el Aeropuerto de Sevilla y hacerse cargo de los gastos de desplazamiento y del 'fisio», algo a lo que no accedió Delgado. Además, el jerezano adelanta que exigió que «el entrenador fuera el que quisieran los jugadores, y no Glenn Hoddle, y lo aceptaron, pero si sus condiciones pasan por obtener la carta de libertad de 12 futbolistas, pues yo lo aceptaría, ya que la intención pasa por tener aquí los futbolistas necesarios para jugar los partidos».

Pese a todo, el delantero recuerda que es el «el presidente el que manda y yo solo soy uno más de los socios del club», aunque argumenta que hubiera aceptado las condiciones de la academia, ya que «el Jerez Industrial está muerto y todo lo que llegue será positivo, como si vienen solo doce jugadores, pero yo solo puedo dar mi opinión como aficionado».

Por su parte, Javier Palos, quien ejerciera este pasado fin de semana como entrenador en el banquillo de La Juventud, hablaba ayer de la posibilidad de que el club y academia lleguen a un nuevo acuerdo para recuperar jugadores que les permita finalizar la competición, Palos reconocía estar «muy decepcionado porque hay una serie de circunstancias en la que la Academia dice que si mandaban los jugadores no estuviéramos ni Javier Igeño ni yo en el club. A mí no me mueve absolutamente nada estar en este club, ni dinero ni nada. A mí lo que me mueve es el fútbol. Yo lo único que quiero es entrenar si me dejan entrenar». Además, el técnico de los juveniles aclaró que «para ser técnico del Jerez Industrial, que creo que no lo voy a ser, tengo que trabajar. Sino me dejan trabajar no voy a ser técnico del Jerez Industrial. Yo para trabajar aquí tengo que trabajar con todas las de la ley como he hecho con los juveniles».