Cesc despeja el dilema del Camp Nou

Cesc Fàbregas todavía no se ha podido enfrentar al Barça en el Camp Nou y, tras la lesión muscular que sufrió el miércoles en partido de la 'Premier', la presencia del centrocampista del Arsenal el 8 de marzo en la vuelta de octavos de final de la 'Champions' está otra vez en el aire. En esta ocasión, sin embargo, las previsiones son bastante más optimistas que el pasado año, cuando Cesc se perdió el segundo partido de cuartos en el estadio azulgrana, ya que se lesionó en la ida al ejecutar un penalti. Entonces, el Barcelona le endosó a un Arsenal sin su estrella un contundente 4-1, con cuatro goles de Messi.

El domingo el Arsenal disputa en Wembley la final de la Carling Cup ante el Birmingham, pero Cesc no podrá jugarla. Estaba dispuesto a quedarse «sin dormir» para luchar por ese título. «He esperado mucho tiempo para ser el capitán del Arsenal en una final y no abandonaré hasta el último segundo», declaró Cesc, antes de conocer el resultado de las pruebas que confirmaron su baja para el domingo.

«Si se confirma que tiene una microrrotura (en los isquiotibiales del muslo derecho) seguiremos el tratamiento para que llegue contra el Barça», anunció el preparador físico del futbolista, Juan Ferrando, convencido de que «Cesc podrá jugar en el Camp Nou sin problemas». «Tiene para diez días, como mucho. Jugará seguro contra el Barça», insistió. El domingo, por tanto, no habrá riesgo de recaída para el internacional español, a una semana de medirse al equipo de Guardiola e intentar vengarse de la eliminación de la pasada temporada.

Solo 14 minutos de partido

Las alarmas en el Arsenal se encendieron la noche del miércoles, cuando solo se llevaban 14 minutos de su choque aplazado contra el Stoke City en Londres (1-0) y Cesc debió abandonar el terreno de juego con molestias en los isquiotibiales. Incluso algunas fuentes anunciaron que podría estar de baja entre dos y tres semanas.

Al parecer, Cesc, que notó «una sensación extraña», pidió el cambio a Arsène Wenger por precaución, y el técnico francés, ya con ventaja en el marcador ante el Stoke, no tardó en retirarle del terreno de juego ante los inminentes y decisivos compromisos que le esperan al equipo londinense.

En el Arsenal se mantuvo la prudencia hasta última hora de la tarde de ayer, cuando el club anunció de forma oficial su baja para la final copera. «Lo único que podemos hacer por él es ganar la Carling», sentenció Wenger.

Cesc es un jugador fundamental en el esquema del Arsenal y, como capitán, tiene tal ascendencia en el vestuario que de su participación en el siguiente choque de la 'Champions' dependen muchas de las opciones que tienen ahora los ingleses para dar la sorpresa y eliminar al Barcelona, con un resultado corto (2-1) pero esperanzador. Su entorno también se refirió ayer a su futuro, y aunque Cesc es objeto de deseo de Florentino Pérez, la declaración de intenciones del futbolista no deja lugar a dudas. «Cesc desea con locura jugar en el Barça», apuntó el preparador físico del jugador en una entrevista concedida a 'ONA FM'.

Quien también parece estar totalmente descartado para el domingo, y posiblemente no llegue a tiempo para el 8-M, es el extremo Walcott, víctima de una lesión en el tobillo izquierdo que le obligó a abandonar el Emirates en camilla. Sin embargo, el Arsenal recuperará ya a Van Persie y Koscielny, ausentes ante el Stoke City.