Arenas asegura que adelantar su gobierno «tiene que dar una mala suerte espantosa»

El presidente del PP-A, Javier Arenas , confirmó ayer que ya tiene en la cabeza al que sería su gobierno en caso de ganar las próximas elecciones en Andalucía, aunque ha asegurado que no lo dará a conocer hasta que finalmente fuera investido como presidente, si es que así lo decide la mayoría de los andaluces.

Durante su intervención en los desayunos informativos de 'Fórum Europa. Tribuna Andalucía', Arenas bromeó afirmando que tiene la impresión de que dar a conocer su gobierno antes de que se celebren las elecciones tiene que dar «una mala suerte espantosa». «El oso no está cazado y no voy a vender la piel antes», añadiço.

En esta línea, el dirigente 'popular' remató que, «ya no a la sombra, sino al sol», la sociedad andaluza irá comprobando en los próximos meses como el PP-A tiene un equipo de personas que son interlocutores en áreas claves para la economía andaluza, «luego una parte de ese equipo será gobierno o no será gobierno». Arenas destacó que cuenta con «una cantera excepcional» pensando en los gobernantes locales del PP y también pensando en los equipos que gobernaron en la etapa del presidente José María Aznar. Además, afirmó que la segunda fila de escaños del PP en el Parlamento «ya sería mejor gobierno que el que tenemos ahora».

Sobre la posibilidad de que en su gobierno haya independientes, consideró que ello sería positivo, así como también que el próximo gobierno fuera el más reducido de la historia de la democracia con sólo diez consejerías y un 50 por ciento menos de altos cargos.

Por otro lado, Arenas manifestó se considera «capaz» de afrontar un gobierno desde una victoria sin mayoría, pero que se teme que eso no va a ser posible. «Va a haber dos opciones claramente: que el PP consiga una mayoría absoluta, porque ya nadie discute la victoria, o la suma PSOE-IU». Finalmente, preguntado sobre las primeras cinco medidas de su gobierno, Arenas ha respondido que en la primera semana realizaría una reforma de la Administración; en la segunda, una reforma fiscal, eliminando, entre otros, el impuesto de Sucesiones y Donaciones; en la tercera, abriría la reforma educativa; en la cuarta, realizaría un plan de ayudas, junto con ONG, a familias sin ingresos; y en la quinta semana, un plan individualizado para maltratadas.