Hackers

Resulta curioso como una palabra puede generar tanta literatura y a la vez ser tan poco conocida. De hecho, si preguntásemos a varias personas al azar qué les viene a la mente cuando se les pregunta por la palabra hacker, todos responderían lo mismo, un delincuente. En este artículo vamos a romper uno de los mayores mitos de los últimos años.

En la década de los sesenta y los setenta, con la proliferación de la informática como ciencia, surgieron personas con una capacidad elevada para resolver problemas complejos de computación, con unas ansias de aprender y divulgar esos conocimientos adquiridos. Fueron sus ansias de aprender lo que les permitieron conocer en profundidad sistemas operativos, aplicaciones informáticas, sistemas de comunicaciones, etc. Estas personas fueron los primeros hackers.

Se sorprenderán al conocer los nombres y personas a las cuales se le han asignado ese término durante los últimos años: Steve Jobs, fundador de Apple Computer, Tim Berners-Lee, inventor de la www, Linus Torvalds, creador de Linux, y así una lista bastante extensa. En esta lista existe una divergencia, Bill Gates, fundador de Microsoft, algunos dicen que sí y otros dicen que no, ya que el primer sistema operativo MS-DOS no fue una creación suya, sino de un joven llamado Tim Paterson, sin embargo, sí fue suya la idea genial y la estrategia de llevarlo a cada casa.

El término hacker que conocemos hoy en día surgió a finales de los setenta y principios de los ochenta, con el desarrollo de las redes de comunicación. Muchas personas se aprovecharon de los conocimientos que divulgaron los primeros hackers, y empezaron a cometer de forma más organizada delitos informáticos: robo de información, acceso no autorizado a sistemas informáticos y redes de comunicación, etc.

Fueron históricas las persecuciones del FBI y la CIA en Estados Unidos a adolescentes y no tan adolescentes que cometieron este tipo de delitos. Quizás la más conocida fue la persecución a Kevin Mitnick, alias Condor, uno de los mayores expertos en ingeniería social, que alimentó varias películas en cine. Resulta curioso y objeto de estudio para las personas que se interesan por esta disciplina de la seguridad de la información cómo conseguía entrar en multinacionales por la puerta delantera y salía por la misma puerta con planos industriales e información altamente confidencial, sin ningún tipo de violencia ni amenaza, solamente aprovechando sus conocimientos de seguridad, sus habilidades de elocuencia y su sangre fría.

Un periodista americano, a raíz de tales acontecimientos, acuñó el término hacker para definir cualquier delincuente informático, y desde entonces, coloquialmente, existe esa relación. Hoy en día, si un experto en seguridad informática dice por ahí que un hacker, se encontraría con miradas de desconfianza y arqueos de cejas.

Si piensan que en España somos menos, se equivocan. Hace poco se hizo una votación no oficial entre la comunidad de expertos en seguridad informática para elegir el hacker más famoso de España, y salió elegido Maligno. No se equivoquen con el alias, es uno de los mayores expertos en seguridad informática de España y muy respetado por todos los que componemos la comunidad.

También en España hemos tenido nuestros delincuentes informáticos, como el D.O.M. Team. Uno de sus delitos más comentados fue cambiar la página web Izquierda Unida por una foto anticonstitucional durante las pasadas elecciones generales. Por supuesto fueron detenidos a raíz de ese hecho.

A muchos delincuentes informáticos les puede el ego, dejar su firma en la escena del delito. Hablando de alias, quizás se pregunten de dónde sacan los hackers y los delincuentes informáticos sus motes de guerra. Bueno, depende de la persona, algunos por su personalidad, porque el mote es chulo, o sencillamente porque se sienten identificados. A propósito, el mío es Raistlin The Mage.