Cajasur se vio obligada a cerrar uno de sus locales en el barrio de Astilleros por la situación económica. :: ANTONIO VÁZQUEZ
Jerez

Las entidades bancarias han cerrado casi 40 sucursales en solo dos años

La crisis y las fusiones entre cajas de ahorros obligan a recortar la red de oficinas, que ya se acerca a los niveles de 2007

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Ese local con suelo de mármol y grandes escaparates que lleva meses vacío en pleno centro albergaba antes un banco. En esa situación han quedado 39 sucursales en la provincia en sólo dos años. La crisis del sector financiero ha obligado a dar cerrojazo a un buen número de oficinas para hacer frente a las pérdidas. Tal vez el modelo estaba sobredimensionado, pero la sangría ya empieza a destruir también puestos de trabajo.

En Cádiz hay 752 sucursales de bancos, cajas de ahorros y cooperativas de créditos (a fecha 1 de septiembre), según el último boletín estadístico del Banco de España. Son 39 menos que hace dos años cuando los grandes grupos empresariales se disputaban las mejores ubicaciones llegando a abrir hasta dos oficinas a pocos metros de distancia para evitar que otro se hiciera con el sitio. La fiebre por estar presente en cada barrio era tal que la red gaditana llegó a crecer más del 40%, especialmente por la expansión de las cajas de ahorro.

Esos excesos en una sociedad que empezaba a vivir por encima de sus posibilidades se pagan ahora. En Andalucía han cerrado 353 establecimientos, lo que devuelve la estadística a niveles de 2007 y se espera que durante este año vaya a más con el empeoramiento de la situación económica y las fusiones de varias firmas como el caso de CajaSur y la vasca BBK, que forzará la salida de servicio de otras tantas oficinas.

Reformas profundas

Manuel Acosta, director del departamento de Economía General de la UCA, recalca que el sistema financiero español está «totalmente sobredimensionado y va a tener que reducir su capacidad». Ese crecimiento ha venido precisamente por las cajas de ahorro y resulta complicado estimar cuántas son las que sobran. «Lo que parece evidente es que con las nuevas fusiones y posibles transformaciones de las cajas en bancos, las oficinas volverán a niveles de 1998, eso supondrá un recorte de entorno al 25%».

En todo este contexto, las cajas serán las que sufran una mayor transformación. «El boom inmobiliario y la consiguiente demanda de créditos hipotecarios hizo que las entidades se lanzaran a un proceso de captación con una oficina cerca de cada cliente».

Además del cierre de locales, es necesario un profundo cambio interno. El profesor Acosta prevé que el nuevo modelo vaya hacia un menor número de sucursales con el número de trabajadores adecuado para atender a las necesidades de cada cliente. «Será necesario que el sector se adapte para satisfacer la demanda de los usuarios».

Pero esta situación no sólo ha estado ligada al ladrillo. Manuel Acosta resalta también la gestión publico-privada de las cajas y su exceso de «politización». Durante estos años «se ha intentado ganar territorio y hacerlas más visibles, ahora esas decisiones pasan factura».

En el caso de la provincia, el crecimiento ha sido más contenido, hay ejemplos como la capital sevillana o la Costa del Sol, donde el crecimiento de la red bancaria superó el 50%. En esos casos la reducción será aún más drástica.

Recorte de plantilla

Toda esta reforma traerá consigo un importante efecto sobre el empleo y este año será determinante para hacernos una idea de cómo quedarán las oficinas. Las entidades llaman a este proceso reducción de la capacidad instalada y se está produciendo de forma bastante intensa, sobre todo entre las cajas, más tocadas por la crisis. La secretaria general de Comfia (la Federación de Servicios Financieros y Administrativos de CC OO) en Cádiz, Begoña López asegura que a partir de ahora se empezarán a ver realmente los movimientos.

Hasta ahora se ha optado por las medidas menos dolorosas. Prejubilaciones y bajas incentivadas es lo que se ha puesto sobre la mesa. La responsable sindical resalta que «en estos dos años ha habido grandes movimientos de fusiones y no se han tomado decisiones a nivel de plantilla hasta ver cómo queda el panorama». Ahora empezarán los cambios mientras el sector vive una gran incertidumbre.

López avanza que las entidades interterritoriales serán las que tengan que recortar menos su red de oficinas. Las interregionales como todas las cajas andaluzas, se verán más afectadas por los cierres, dado la duplicidad de locales.