Agricultores denuncian a Consumo la venta de aceite por debajo del coste

La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en Andalucía anunció que demandará a Carrefour ante la Consejería de Turismo, Comercio y Deportes por lo que considera una «política abusiva» y «reiterada» por parte de la cadena de distribución al vender a pérdidas aceite de oliva virgen extra de su marca, algo que está llevando a una «situación límite al sector». COAG también anunció que se suma a esta denuncia.

El secretario general de UPA-A, Agustín Rodríguez, explicó que la compañía vuelve a usar al aceite de oliva como «producto reclamo» y lo presenta en una oferta de dos garrafas de cinco litros con la segunda unidad con un descuento del 70 por ciento, de modo que el precio por litro se sitúa en 1,75 euros, «muy por debajo del coste de producción» así como del que en el último año se ha pagado en origen.

Al respecto, mostró un gráfico con la evolución del precio en origen del aceite de oliva virgen extra en España entre enero de 2010 y 2011. La media fue de dos euros por kilo y «en ningún momento se baja de 1,85 euros». Además, tal y como precisó, en esta cifra no está incluido el coste de envasado, transporte y beneficios que la «dispararía» aún más. «Queda perfectamente claro que la política abusiva de la gran distribución, en este caso de Carrefour, está cometiendo presuntamente un delito que incurre en dos leyes: la de competencia desleal y la de ordenación de comercio minorista», afirmó Rodríguez.

Por ello, en esta ocasión los servicios jurídicos de la organización agraria, tras analizar la jurisprudencia, van a interponer la denuncia ante la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte al entender que es Comercio la autoridad competente para inspeccionar si realmente el precio del origen del aceite de oliva virgen extra está por encima del que se ofrece al consumidor. «No se trata de un problema de calidad, con el que iríamos a Consumo o Agricultura, sino de venta a pérdidas y por ello vamos a Comercio», apostilló.

Prestigio del aceite

En cualquier caso, Rodríguez lamentó que las administraciones que tienen la capacidad de revisar las leyes para evitar situaciones como esta lo anuncian y «no lo hacen», mientras esta política abusiva «se refugia precisamente en la ambigüedad de la norma» con cuestiones como la de grandes descuentos en segundas unidades.

Preguntado por la posibilidad de acudir a instancias europeas al tratarse de una multinacional que ha llevado ofertas parecidas a otras naciones como Italia, el secretario general de UPA-A indicó que el panorama entre este país y España «no tiene comparación» en lo que a marcas blancas se refiere. «La influencia de la marca blanca supera el 65 por ciento en España. En Italia no llega al 17 por ciento, por lo que aquí no es un problema y es muy grave en España», comentó para añadir que no se da sólo en el aceite de oliva, sino también en otros productos como la leche o el arroz.

Mientras, COAG ha alertado sobre los peligros de banalización de la imagen del aceite de oliva al utilizarlo como producto reclamo para los consumidores.

«El prestigio internacional del aceite de oliva se fundamenta en el trabajo y esfuerzo de generaciones de olivareros para ofrecer una materia prima de calidad, sana y segura. Con este tipo de prácticas comerciales la gran distribución echa por tierra todo ese buen hacer y se embarca en una cruzada cortoplacista por mantener beneficios a costa de lo que sea», argumentó el responsable del sector del olivar de la Comisión Ejecutiva de COAG , José Luis Iranzo.