La petrolera Repsol invertirá 28.500 millones entre 2010 y 2014

Sube el precio del crudo y se animan las cuentas de las petroleras. Repsol ganó en el primer trimestre del año 688 millones de euros, un 30% más, y su presidente, Antonio Brufau, hizo coincidir la publicación de este dato con la actualización del plan estratégico de la compañía, en vísperas de la junta de accionistas. En los próximos cuatro años, la compañía realizará inversiones por 28.500 millones de euros, porque los últimos y «extraordinarios» descubrimientos de petróleo y gas le van a permitir crecer en tasas de dos dígitos en todas las variables.

Brufau también aclaró que recuperar la senda del crecimiento va a permitir a la petrolera aumentar la retribución al accionista. El recorte de esta remuneración provocó tensiones entre el ejecutivo y los representantes de Sacyr, propietarios del 12% del capital de la compañía. Si se cumplen las hipótesis de precios y márgenes el dividendo crecerá el 10%. En todo caso, el presidente aseguró que el nuevo plan ha sido aprobado con el voto unánime del consejo.

El proyecto estratégico actualizado prevé desinversiones por un total de 4.500 millones de euros después de impuestos. Reitera la intención de vender una parte de la argentina YPF, en la que se invertirán, no obstante, 8.400 millones de euros. La incorporación de nuevos propietarios se llevará a cabo a través de la entrada de socios institucionales o mediante la colocación en Bolsa en el plazo de un año.

Desarrollo en Brasil

El resto de las inversiones se distribuyen entre el negocio de exploración y producción y gas natural licuado, al que se destinan 9.400 millones de euros; el área de refino y marketing, con 6.700 millones de euros, y la participada Gas Natural Fenosa, a la que corresponden 3.400 millones. En Brasil, que constituye uno de los focos de desarrollo, Repsol se propone financiar la inversión, estimada en 4.000 millones de dólares hasta 2014, con la incorporación de accionistas minoritarios. Ya hay bancos de negocios estudiando esta posibilidad, que tiene como condición el mantenimiento del control de los proyectos en manos de la petrolera.

En conferencia de prensa, Brufau se sumó a otros empresarios del sector energético, que han cuestionado la sostenibilidad del sistema eléctrico por el elevado coste de las primas de las renovables. El presidente de Repsol es agente interesado en este debate, en el que pidió participar, porque la entrada de nueva capacidad renovable, la menor demanda y el uso del carbón nacional han desplazado a la generación eléctrica mediante centrales de ciclo combinado, que queman gas, lo que constituye una preocupación para los productores de gas natural y propietarios de este tipo de instalaciones.