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El Rayo Vallecano coge aire a costa de asfixiar a Las Palmas

Pachón marca dos goles decisivos en un duelo con muchos nervios pues el miedo al descenso está presente en ambos equipos

MADRID. Actualizado: Guardar
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El Rayo Vallecano consiguió una importante victoria en casa ante Las Palmas, rival directo en lucha por evitar el descenso, en un encuentro que dominó en la primera parte y mostró efectividad, aunque en la segunda parte, y con una ventaja de un gol, sólo pretendió aguantar el marcador y esperar el final.

Había mucho en juego en el Teresa Rivero. Dos equipos en plena dinámica negativa que pugnaban por coger aire ante un rival directo, y con mucho miedo a las últimas plazas de por medio. Sacaron mucha pólvora arriba, el Rayo casi todo lo que tenía ante sus muchas bajas, mientras los insulares con las líneas muy adelantadas desde el inicio buscaban presión para los locales.

Pero los hombres más adelantados del Rayo estaban inspirados. Pachón avisó, al recoger un mal despeje de Pignol, aunque su intento de remate salió desviado a la derecha del portero. Misma suerte correría el nueve rayista seis minutos después. Esta vez fue Samuel quien taponó su remate, aunque entonces, la esquiva fortuna acompañaría, el balón salió directo a la frontal del área, donde se encontraba Ángel, quien con un fuerte derechazo batía a Pindado.

La anécdota estuvo en la lesión del colegiado Mariscal Sánchez, cuando andando hacía atrás y contemplando el juego caía solo con un tirón en la parte posterior del muslo derecho. Sánchez Maroto, cuarto árbitro, se tuvo que hacer cargo de la dirección del encuentro.

Y justo con la vuelta del juego al césped vallecano llegaba el segundo tanto local. Pachón hacía válida la tercera ocasión de la que disponía y demostraba su clase en un control con el pecho dentro del área y remate a la media vuelta.

Los nervios volvían a la grada cuando Sergio Suárez acortaba distancias, de falta directa, un tanto muy discutido por los jugadores locales puesto que entendieron que el libre era indirecto.

Eran momentos en los que regresaron los fantasmas a la grada, no por el peligro real del conjunto canario, sino por los muchos reveses sufridos en los últimos encuentros. Pero Pachón devolvería la tranquilidad a la grada sólo cuatro minutos después.

Nada más terminar el descanso, Javi Guerrero acortaba distancias. Pero a diferencia de otras ocasiones, el Rayo supo contener el resultado hasta el final, pese al mejor juego de Las Palmas , a las ocasiones visitantes, y a los nervios evidentes en algunos lances del encuentro.