Los precios bajaron un 1% en enero por las agresivas rebajas

Los precios disminuyeron un 1% en enero respecto a diciembre por las agresivas rebajas de invierno con que los comerciantes dieron la bienvenida a 2010, en un intento por vender los productos que no encontraron salida en la última campaña de Navidad. Pese a ese recorte mensual, la tasa anual del IPC subió dos décimas y se situó en el 1% positivo, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Los productos que más se abarataron el mes pasado respecto del anterior fueron el vestido y el calzado. Los precios de estos artículos, que en rebajas se vendieron con descuentos de hasta el 70%, sufrieron una disminución media del 14,1%, que arrastró el índice a la baja. El Gobierno resalta en su análisis que estos artículos registraron «descuentos que en esta ocasión han sido algo mayores de lo habitual».

También bajaron los bienes y servicios de ocio y cultura, un 1,9%, principalmente por la reducción de los precios de los viajes organizados. Por último, los artículos de menaje se depreciaron un 0,9%, valor que según los técnicos del INE refleja «las disminuciones de precios habituales en el mes de enero».

En enero subió el transporte, un 1,7%, debido al repunte de precios de los carburantes y lubricantes. También el segmento de la vivienda, en el que los precios aumentaron un 0,8% por la subida de las tarifas de la electricidad, gasóleo para calefacción y gas. En el grupo otros bienes y servicios los precios subieron un 0,6% por el encarecimiento de los seguros, habitual a comienzos del año, según Estadística.

La tasa anual del IPC avanzó en enero dos décimas pese a las rebajas, y se situó en el 1%. La inflación subyacente -que excluye del cálculo los elementos más volátiles como los carburantes y los alimentos frescos- retrocedió dos décimas respecto del valor registrado en diciembre, hasta el 0,1%. El índice de precios al consumo armonizado (IPCA) marcó un 1,1% interanual. De confirmarse también el dato adelantado por la oficina estadística de la eurozona (1%), supondría una vuelta de la economía española a un diferencial positivo de inflación respecto de los socios de la moneda única. Aunque leve, esa distancia perjudica a la competitividad.

Los grupos que más se encarecieron respecto de enero de 2008 fueron transporte (6,3%), por la evolución de los carburantes y la vivienda (1,2%) por el comportamiento de la energía de consumo doméstico. Entre los mayores descensos, destacó el ocio y la cultura, que cayó un 1,6% interanual por las rebajas en el sector de los viajes.