JUSTICIA

Un gaditano frente a la trama de espionaje a la Infanta en el 'Caso Nóos'

El abogado isleño Alberto Domínguez desmonta la acusación sobre los letrados señalados por grabar presuntamente la declaración de Cristina de Borbón

Un momento del juicio del Caso 'Nóos'

CARLOS CHERBUY

Nunca antes se había enfrentado a un caso similar. Ni por mediático, ni por la relevancia ni por las circunstancias. Aún así el abogado gaditano Alberto Domínguez (socio fundador del despacho Domínguez &Silva abogados) no dudó en aceptar la petición de su compañera de profesión, Carmen Jiménez, para que la defendiera de la acusación que pesaba sobre ella (y que compartía con el otro letrado señalado, Francisco Carvajal) de haber grabado la primera declaración de la Infanta Cristina de Borbón en los juzgados de Palma con motivo del 'caso Nóos' .

Y a pesar de la presión, los temores y los informes que pesaban sobre ellos, Alberto Domínguez ha conseguido romper la supuesta trama de espionaje que pesaba sobre su defendida y lograr la absolución , cuando desde Fiscalía se le pedía un año de prisión (por desobediencia grave a la autoridad) y la inhabilitación.

«Lo primero que quiero decir es que estamos muy satisfechos y que sentimos que se ha hecho justicia. Quiero además alabar la valentía de la jueza por su imparcialidad ante un caso tan particular y que se ajustara a las pruebas señalando las contradicciones de los informes y precisamente la falta de base para la acusación de tales letrados como los que realizaron la grabación que trascendió a los medios de comunicación».

Su capacidad y su forma de resolver las vistas orales fue lo que llamó la atención de Carmen Jiménez, que había realizado varias colaboraciones con este isleño que comparte despacho entre Madrid y San Fernando, que no dudó en pedirle que llevara su defensa. De inmediato Alberto sintió la presión de un caso tan relevante, pero supo solventarla y encauzar todo lo que rodeaba al caso para exponer la inocencia de Carmen.

«Sientes cómo los focos se posan en ti y comienzas a salir en primeras planas de periódicos cuando expones que las dudas y los indicios también señalan a otros como los funcionarios del propio juzgados. Todo ello junto al temor de lo rápido que fue todo, de cómo de inmediato se montó una acusación sobre dos personas que además pienso que eran las más fáciles de señalar, puesto que no tenían recorrido en el proceso y eran la primera vez que acudían. Estamos hablando además de que se trata de la declaración de la hermana del Rey de España y que había un dispositivo de seguridad a nivel de Jefe de Estado que fue vulnerado. Muchos huecos que se querían tapar y haciéndolo con Carmen y con Francisco. Pero al final se ha podido demostrar que ellos no fueron».

Hace poco que Alberto ha emprendido su aventura en Madrid, pero cada vez está obteniendo mayor repercusión. Este caso ya la está sirviendo de plataforma, pero antes incluso ya había conseguido un buen nombre que le llevó a ser tentado para ser el representante legal de uno de los imputados dentro de otra gran trama a nivel nacional, el conocido como el 'caso Gürtel' , «pero no tenía capacidad para dedicarme de forma exclusiva a ello cuando ya hay más de un millón de folios respecto a este caso y te tienes que dedicar a él de forma completa».

Respecto a la sentencia de absolución de los abogados acusados de realizar la grabación, cabe destacar que la jueza instructora en su sentencia sostiene que no hay pruebas suficientes para asegurar que los letrados Francisco Carvajal y María del Carmen Jiménez captaron con un dispositivo oculto la comparecencia de la esposa de Iñaki Urdangarin ante el juez Castro. Un juez que precisamente había dictado el 28 de enero de 2014 una providencia en la que prohibía «terminantemente» que durante la declaración de Doña Cristina se pudiera acceder a los Juzgados centrales de la capital balear con dispositivos aptos para la captación de imágenes o sonidos. Sin embargo, un día después de la comparecencia de la Infanta, que fue un 8 de febrero de 2014, fueron difundidas imágenes de su intervención a través de una plataforma web.

Como se ha señalado ya, durante el juicio celebrado hace tres meses Carvajal y Jiménez se desvincularon por completo tanto de la grabación del mencionado vídeo como de su posterior difusión a través de internet. En ese sentido, ambos recordaron que aquel 8 de febrero de 2014 tuvieron que pasar varios controles de seguridad antes de entrar en la sala en donde declaró la Infanta. En uno de dichos controles le incautaron a Carvajal su teléfono móvil y su 'tablet', mientras que a Jiménez le retiraron su celular.

«No fue complicado desmontar la acusación ya que todo se hizo muy deprisa y corriendo y se cometieron muchos errores. Precisamente me llama la atención la asistencia en la sala de una decena de funcionarios, cunado no hacía falta tantos, que ellos no estuvieran registrados en los controles o que hubiera algunos que solo permanecieran una media hora en la sala. Quiero aclarar que yo no acuso solo recojo una serie de indicios que muestran que puede haber más posibles autores».

Lo cierto es que la jueza le ha dado la razón y ha absuelto tanto a Carmen como a Francisco, siendo el gaditano Alberto Domínguez una pieza clave para desmontar el entramado creado y dejando su sello en una de las causas más llamativas a nivel nacional e internacional.

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