'caso palma arena'

Urdangarin controlaba las cuentas de Nóos, según testigos

La secretaria del duque asegura que éste le dictó los datos de una cuenta en Suiza

BARCELONA Actualizado: Guardar
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Las comparecencias de empleados y proveedores del Instituto Nóos ante el juez José Castro, en el marco de las investigaciones del 'caso Palma Arena', han vuelto a poner en entredicho este viernes al duque de Palma, cuando afirmó que su labor al frente de la entidad sin ánimo de lucro se limitaba a labores de mera representación y que su vinculación con la entidad acabó en marzo de 2006, cuando se lo pidió la Casa Real.

El testimonio más relevante del día ha sido el de Julita Cuquerella Gamboa, asistente personal de Urdangarin, autora del famoso 'post-it' en el que se apunta la existencia de una cuenta en Suiza y cuyo nombre figura en varios correos electrónicos incluidos en el sumario, en uno de los cuales queda reflejada la búsqueda de trabajadores ficticios con el objetivo de obtener beneficios fiscales para el entramado societario de Urdangarin y Torres.

Cuquerella ha relatado al juez que fue ella quien escribió, siguiendo el dictado del duque de Palma, la nota que recibió un supuesto testaferro con indicaciones sobre un contrato en el que aparecía el número de una cuenta en Suiza. En la nota se apuntaba que, siguiendo órdenes de "Iñaki", le enviaba al destinatario las dos copias de un contrato y agregaba: "Me dice Iñaki que, una vez firmadas, habría que enviarle una a él. También me pide que te copie el siguiente número de cuenta, que tú ya sabes para qué es: Alternative General Services Limited/ Credit Suisse/ Laussane (0 251 206 980 8)".

La secretaria de Urdangarin ha precisado que el número de cuenta se lo facilitó al duque de Palma José María Treviño, un amigo del yerno del Rey que fue testigo en la causa, y ha remarcado que desconocía si el destinatario final de la nota era el belga Robert Cockx, a quien los informes policiales sitúan como testaferro.

Cuquerella ha señalado además que Urdangarin mantuvo entre diez y doce reuniones con Diego Torres entre abril de 2008 y agosto de 2009, mucho después de marzo de 2006, fecha en que el yerno del Rey aseguró que había dejado estas actividades.

Firmaba los cheques

Por lo demás, tal y como ha declarado Sergio Fernández, empresario y proveedor del Instituto Nóos, Iñaki Urdangarin firmaba los cheques de la sociedad y por tanto sus actuaciones no se circunscribían a las relaciones institucionales, como siempre ha mantenido en sus declaraciones, en las que ha cargado sobre su socio Diego Torres la responsabilidad de las actividades económicas de la fundación y la gestión del día a día, de la que él siempre ha asegurado que se mantenía al margen.

María Teresa Zazo, la administrativa que coordinaba la oficina en la que trabajaban Diego Torres e Iñaki Urdangarin ha testificado que ambos mandaban por igual en Nóos, como expresaron buena parte de los testigos el jueves. Y no sólo eso, sino que también estaban al frente de la entidad sin ánimo de lucro que promovieron ambos, la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social, sociedad creada a finales del año 2006 después de que la Casa Real indicara a Urdangarin que debía abandonar sus negocios al frente de Nóos y que habría servido para dar continuidad a la labor que venían desarrollando y que al parecer habría sido utilizada para la evasión de capitales.

La ronda de declaraciones en la capital catalana se cierra este sábado con la citación de 14 testigos, entre ellos la exconsejera de Salud de la Generalitat catalana, Marina Geli.