Simeone se postula como sustituto de Manzano

Mientras el aterrizaje del ‘Cholo’ Simeone en el Calderón parece que toma cuerpo y la despedida de Gregorio Manzano se consuma, el Atlético se prepara en un clima de absoluta confusión para disputar una ‘final’ en los dieciseisavos de Copa del Rey ante el Albacete. Perdidos en la Liga, a diez puntos del objetivo de la ‘Champions’, cinco de la Liga Europa y solo cuatro del descenso, los rojiblancos están obligados a remontar el 2-1 adverso del Carlos Belmonte si no quieren consumar un fracaso histórico, toda vez que nunca cayeron en el torneo del K.O. ante un rival de Segunda B.

Manzano consumirá ante los manchegos el último de los tres partidos para los que fue confirmado tras la goleada sufrida ante el Espanyol en Cornellá el Prat. Cumplió ante el Rennes en Europa, fracasó el pasado domingo frente al Betis y asume que justo antes de Navidades conocerá el final de su segunda etapa fallida en el Atlético. Le humillaron con esa ratificación temporal para ver si dimitía y se ahorraban el finiquito, pero el técnico jienense no perdonará ni un euro a Miguel Ángel Gil, consejero delegado de la entidad, y al presidente Enrique Cerezo.

La pésima trayectoria del Atlético fuera de casa, donde se ha confirmado como el peor equipo de la Liga con solo un punto cosechado, ha sido un lastre imposible de soportar para Manzano, interino desde que llegó como cuarta opción tras los ‘noes’ sucesivos de Rafa Benítez, Luis Enrique y Joaquín Caparrós. No es descartable que con Manzano se vaya también José Luis Pérez Caminero, el director deportivo que le trajo y con quien comparte representante en la figura de Manuel García Quilón. Baraja y Vizcaíno, otros dos auxiliares del banquillo manejados por este agente, están igualmente en el disparadero.

Dimisión reveladora

Simeone se situó como mejor colocado en el ‘casting’ para el banquillo ‘colchonero’ tras conocerse que la pasada madrugada dimitió al frente de Racing de Avellaneda a pesar de que tenía contrato en vigor hasta junio próximo. La renuncia del ‘Cholo’ apunta oficialmente a la «falta de apoyo» por parte de la directiva, la misma que le hizo marcharse del equipo albiceleste hace seis años, en su primera experiencia como técnico, pero, según algunas fuentes, los motivos reales son diferentes. Con profundo arraigo en el Calderón, Simeone siempre dijo que por el Atlético lo dejaría todo.

Curiosamente, el argentino puede llegar para reemplazar a un técnico que le dirigió en el Atlético del curso 2003-2004. Llegaría acompañado del ‘Mono’ Burgos, otro exrojiblanco que ya le ayudó en el Catania, al que el ‘Cholo’ salvó del descenso en su primera y única aventura como técnico europeo. Sus mayores logros como entrenador son el Apertura conquistado en 2006 con Estudiantes, donde puso fin a una sequía de 23 años sin títulos nacionales, y el Clausura de 2008 con River Plate.

Si se consuma, el fichaje del populista Simeone serviría de bálsamo para una hinchada que corea tanto su nombre como el de Luis Aragonés desde hace tiempo. Es uno de los símbolos del doblete de 1996. Simeone suena con fuerza mientras se apagan las opciones del ‘Sabio de Hortaleza’, incompatible con la familia Gil; Juande Ramos, con trabajo en el Dnipro de Ucrania; Rafa Benítez, a la espera de algún club con opciones de ‘Champions’, y el brasileño ‘Felipao’ Scolari.