Al Barça le cuesta demasiado ganar fuera

Al Barça le cuesta demasiado ganar fuera del Camp Nou. Esta temporada ya ha perdido tantos puntos fuera, en solo seis partidos, como todos los que cedió la pasada campaña cuando se llevaban disputadas 32 jornadas.

Antes de caer ante el Getafe, ya sufrió para ganar en Gijón y Granada, y ha cedido hasta ahora tres empates. Solo ha sido capaz de marcar ocho goles a domicilio en la Liga, mientras que ha encajado siete, cuando en su campo se mantiene imbatido. Cierto es que los azulgrana no han tenido suerte para ver reflejado en el marcador su dominio en los partidos en los que han tropezado, pero el equipo de Guardiola también ha evidenciado cierta lentitud y cansancio. A veces se ha enredado en exceso en el barroqismo, sin capacidad de resolución. Aparte de Cesc, solamente Xavi (dos goles), Messi, Pedro y Adriano han marcado fuera de casa.

El balón ha sido suyo, pero las defensas cerradas se han convertido en muchas ocasiones en escollos insalvables para el campeón. Sin embargo, en el trepidante choque de San Mamés, con ambos equipos a tumba abierta en una demostración de fútbol y despliegue físico, también estuvo a punto de caer. Lo evitó Messi como un gol de última hora. Sin embargo, la fortuna abandonó a los azulgrana en Getafe, con el disparo del argentino que pegó en el poste en el tiempo añadido, cuando el Barcelona se había merecido al menos el empate. En otras ocasiones, ese balón habría entrado y habría evitado que los azulgrana se alejasen del Madrid a seis puntos.

Excepto en sus dos únicos triunfos fuera, al Barcelona siempre le han marcado al menos un gol, y en la mitad de sus enfrentamientos se ha llevado dos. Así ocurrió no solo en Bilbao, sino en las dos primeras jornadas, ante la Real Sociedad y el Valencia. Sin embargo, fuera de su campo, con la mayoría de los rivales echados atrás, le ha abandonado la pegada de la que tanto presumía. Incluso equipos como el Rayo y la Real, por debajo de la mitad de la tabla, han marcado tantos goles como los llevan los de Guardiola a domicilio. Una sequía preocupante la de los culés a domicilio, donde Messi, que se sale en Europa, está muy controlado por los adversarios que juegan para destruir. A su fútbol le falta gol lejos de su estadio. La diferencia entre jugar en casa o fuera es espectaclar, porque en el Camp Nou suma de momento 39 tantos.