INDUSTRIA
Nuevo salto mortal de Airtificial
La compañía, que surgió en 2018 de la fusión de la gaditana Carbures y de Inypsa, celebra una junta general para ampliar capital y despedir a su presidente, Rafael Contreras
Desmantelan la planta de Illescas y denuncian que la maquinaria se traslada a Jerez en lugar de a Getafe
El próximo 23 de junio la compañía Airtificial , nueva entidad que surgió en diciembre de 2018 de la fusión de la gaditana Carbures y de la empresa de ingeniería Inypsa, celebrará una junta general de accionistas para marcar un nuevo rumbo y aprobar una ampliación de capital de 15 millones de euros. En esta junta dirá adiós su presidente, el gaditano y fundador de Carbures, Rafael Contreras , que el pasado marzo vendió el 2% de su participación. Esta operación le aportó un beneficio de 900.000 euros. Contreras abandona en un momento delicado de la compañía para emprender un nuevo proyecto empresarial, sin embargo, su salida deja varias incógnitas. ¿Está asegurada la viabilidad de la empresa? ¿Qué fue del Hyperlood, el prototipo del tren del futuro que se desarrolló en la Bahía? ¿Qué futuro tienen las dos plantas gaditanas de Airtificial?
La primera repercusión de los últimos movimientos accionariales en Airtificial se han detectado en la factoría de Illescas (Toledo) esta misma semana, donde el sindicato CCOO ha denunciado el desmantelamiento de la planta en pleno puente del Corpus. Según la central sindical, la dirección de la empresa ha ordenado el traslado de la maquinaria y el utillaje a la factoría de Jerez . Los 53 trabajadores de Airtificial-Illescas, inmersos en un ERTE que debe acabar el 1 de octubre, han mostrado su inquietud y aclaran que el pacto era trasladar la maquinaria a Getafe y no a Jerez.
Airtificial decidió hace dos años cerrar la planta de Illescas, dedicada a la fabricación y montaje de elementos aeroespaciales sobre todo para Airbus, para trasladarse a Getafe. Con la parálisis del sector aeronáutico a consecuencia de la pandemia, la dirección de Airtificial y la parte social -los cinco miembros del comité son de CCOO- acordaron en mayo un ERTE de cuatro meses, que la empresa aprovecharía para realizar la mudanza de Illescas a la nueva planta Getafe, donde todos los trabajadores deben reanudar la actividad el 1 de octubre . Sin embargo, los planes, según el sindicato, no se ajustan a lo pactado porque la maquinaria se ha ido a Jerez. «Esta actuación de Airtificial ha llenado de inquietud a los trabajadores de Illescas, que temen que su empresa pueda incumplir lo acordado», denuncia Jesús Domingo, coordinador del Sector Aeronáutico de CCOO-Industria en Castilla La Mancha.
Airtificial atraviesa un momento complicado y la junta de accionistas del día 23 propondrá reforzar su balance mediante una operación de reducción y ampliación de capital. Así, reducirá el capital social por importe de 45,2 millones de euros, con el objetivo de restablecer el equilibrio entre el capital y el patrimonio neto de la sociedad , disminuido como consecuencia de pérdidas de cerca de 35 millones de euros contabilizadas en 2019.
De esta forma, el valor nominal de todas las acciones pasará de 0,137 euros por título a 0,09 euros, previamente a la ejecución de dos ampliaciones de capital de 15 millones de euros y de 4,3 millones de euros, respectivamente, que fijarán el capital social de la empresa en 106 millones de euros. Los actuales accionistas podrán ejercer un derecho de suscripción preferente en un tramo de 15 millones de euros.
Soltar lastre
La celebración de esta junta coincide en el tiempo con una operación de venta de acciones realizada el pasado marzo por su presidente y fundador de Carbures, el gaditano Rafael Contreras, que se desprendió del 2,1%, es decir, veinte millones de títulos de la compañía de ingeniería de obras públicas, renovables y defensa, y de fabricación de componentes para automoción y aeronáutica en fibra de carbono. Ese mismo mes, Airtificial vendió su participación en la filial de México , el Grupo Profesional Planeación y Proyectos S.A (PYPSA), siguiendo «su plan de desinversión de activos no estratégicos para reforzar su balance y concentrar su actividad operativa» y reducir deuda.
En una entrevista concedida la pasada semana a El Español, Contreras avanzó su decisión de abandonar Airtificial para encabezar Humanox, una compañía especializada en el rendimiento de los futbolistas apoyándose en espinilleras inteligentes de fibra de carbono.
Fuentes de la compañía han confirmado a LA VOZ que Contreras abandona la presidencia pero se mantiene como accionista de Airtificial con un 5% . El resto está en manos de la sociedad de capital riesgo Black Toro Capital, que suma el 20%. Este fondo de inversión es el mismo que controla la empresa de motos Torrot, que tenía previsto invertir en Cádiz más de 15 millones de euros e la fabricación del Velocípedo y que finalmente se abortó. Como accionistas de Airtificial están también dos de los antiguos propietarios de Inypsa, Leonardo Sánchez-Heredero (15,1%) y el periodista Lalo Azcona (7,2%).El Grupo Melca, una firma asturiana que participaba en Inypsa, cuenta con el 5%, mientras que María Paz Pérez tiene una participación del 3,1%. El resto del capital cotiza en bolsa.
Balance con pérdidas
Cabe recordar que Airtificial presentó el pasado febrero unos resultados con pérdidas por valor de 34,7 millones de euros correspondientes al ejercicio de 2019, su primer año fiscal completo tras la fusión entre Carbures e Inypsa. La empresa achacó los números rojos «a la dotación de provisiones extraordinarias durante el ejercicio«, en clara referencia al ejercicio de realidad que realizó en el primer semestre, cuando provisionó 25 millones por el ajuste del valor en libros de varios activos, y reservó otros 3,2 millones por el impacto de una sentencia adversa en los tribunales de Nueva York.
El resultado operativo se vio impactado el año pasado por el inicio del proceso de reorganización industrial, lo que le hizo pasar de un beneficio neto de un millón de euros en 2018 a las pérdidas de cerca de 35 millones en 2019.
Precisamente, el último ejercicio también fue muy ajetreado a nivel de dirección. Así Javier Martín , nombrado consejero delegado en verano, abandonó la empresa tres meses después. Martín había reemplazado a Borja Martínez-Laredo , quien presentó su renuncia «por motivos personales» tras llegar en la empresa en mayo de 2017. Su sustituto fue Rafael Suñol , que ya había formado parte de los consejos de administración tanto de Carbures como de Inypsa.
Lo que empezó en 1999 como un pequeño proyecto de investigación y desarrollo de la Universidad de Cádiz , denominado entonces Easy Solutions , en la fabricación de componentes y estructuras en fibra de carbono pasó en 2005 a llamarse Carbures y en 2018, tras fusionarse con Inypsa, surgió la nueva denominación de Airtificial .
