Patrimonio Histórico

El Molino de Mareas de Río Arillo entra en la Lista Roja del Patrimonio por su «pésimo estado»

Este inmueble histórico de 1759, Bien de Interés Cultural, se encuentra en el término municipal de Cádiz capital y es propiedad de Costas

H. N.

J. M. A. / N. A.

El Molino de Marea del Río Arillo, perteneciente al término municipal de Cádiz capital y en la carretera que le une con San Fernando, acaba de entrar en la Lista Roja del patrimonio nacional por su «pésimo estado» de conservación. La Asociación Hispania Nostra lo ha incluido en el documento que recoge elementos del patrimonio cultural español que se encuentren sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores.

Fácilmente visible pues se encuentra a pie de carretera, durante estos años se ha podido ser testigo de su degradación hasta convertirse en una ruina. Entra en la Lista Roja porque «el estado de conservación es pésimo», señala la organización. «Parece que se instaló un apuntalamiento metálico en el año 2007, aproximadamente, para evitar el derrumbe total . Desde entonces no se ha realizado ninguna actuación. La zona se encuentra llena de basura y pintadas .El edificio ha perdido las cubiertas, manteniéndose solo en pie los muros y la estructura de arcos sobre el agua».

El molino, construido en el año 1759 para abastecer de harina a las ciudades de Cádiz y San Fernando, dejó de funcionar en los años 30 del siglo XX. Casi un siglo después, existe un «riesgo de pérdida irreversible» .

Se trata de un Bien de Interés Cultural (BIC), pero este grado de protección no le ha servido para evitarle caer en un estado ruinoso. «Durante la segunda mitad del siglo XIX y las primeras décadas del XX, esta infraestructura se habilitó para acoger la recepción oficial de los recién nombrados prelados de la Diócesis a su llegada a Cádiz. Otros personajes históricos como Fernando VII, Isabel II, Alfonso XIII o el General Manso también conocieron sus instalaciones de primera mano. Se dice que la Reina Isabel II y su esposo Francisco de Borbón, Duque de Cádiz, estuvieron allí pescando en un estero preparado para la ocasión y tomando un refresco tras un «decoroso recibimiento» por parte del entonces dueño, Félix García de Lizarra».

Personajes históricos como Fernando VII, Isabel II, Alfonso XIII o el General Manson conocieron sus instalaciones de primera mano

En este siglo XXI desde del anterior equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cádiz, dirigido por Teófila Martínez, se intentó restaurarlo para convertirlo en el Museo de las Salinas y aprovecharlo para el beneficio cultural de la ciudad. El Consistorio se lo expropió a la antigua propiedad (Unión Salinera) por su dejadez y se inició un proceso para su recuperación con la unión de las tres administraciones (municipal, autonómica y nacional).

Pero tres años después, e l Ministerio de Medio Ambiente consiguió por vía judicial -y tras sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA)- la propiedad del molino. Así que ahora mismo la competencia es de este Ministerio, a través de la Demarcación de Costas. Los dirigentes del actual Ayuntamiento gaditano (Adelante Andalucía) también han pedido una intervención urgente para poner en valor este espacio. No obstante, se contradice con las declaraciones del alcalde José María González, que afirmó en enero de este año que Cádiz llegaba hasta el restaurante el Chato , como motivo para no iluminar la carretera hasta San Fernando .

Un inmueble histórico

El Molino del Río Arillo es considerado como uno de los molinos mareales más importantes de los que existieron en todo el occidente atlántico, debido a su capacidad de molienda con las 12 piedras moledoras de trigo que poseía.

El edificio presenta una composición funcional y geométrica propia de los edificios militares e industriales diseñados por los ingenieros militares en el siglo XVIII en la zona.

Construido en 1759 y ampliado en el siglo XIX, el edificio reproduce formas estilísticas de las ciudades del entorno, como los remates en forma de jarrón que coronan los pretiles del edificio así como del uso de técnicas constructivas de la zona. Los arcos de la base, en contacto con el agua, son de cantería de piedra ostionera de gran calidad en la factura, el resto del edificio es de hileras de mampostería del mismo tipo de piedra reforzando vanos y esquinas con bloques de cantería del mismo material. En la crujía principal se ubicaban las piedras de molienda, dejando las demás dependencias para almacenar el grano y para vivienda.

Otros lugares incluidos en la Lista Roja

En esta Lista Roja del Patrimonio hay hasta 24 edificios históricos de la provincia de Cádiz. Los últimos en incluirse han sido el Palacio de Riquelme en Jerez y el Palacio de Orleans–Borbón en Sanlúcar de Barrameda. Además están las cuevas de San Cristóbal de El Puerto, la escuela de Artes y Oficios de Algeciras y el patrimonio rupestre que alberga la provincia gaditana.

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