El Ayuntamiento pide una reunión 'in extremis' para evitar el cierre de los chiringuitos en invierno

La Junta de Andalucía ha rechazado la petición enviada el pasado lunes por el Ayuntamiento de Cádiz en la que solicitaba una ampliación extraordinaria del periodo de apertura de los chiringuitos. Según el delegado territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Ángel Acuña, la concesión de este permiso por segundo año consecutivo supondría incurrir en un fraude de Ley, ya que la administración ya tiene a disposición de las entidades locales un nuevo procedimiento para regularizar esta permanencia, y que supondría iniciar un procedimiento de modificación sustancial. De hecho, todos los ayuntamientos, excepto el de Cádiz, han iniciado la tramitación por esta vía.

La respuesta por parte del Gobierno regional ha despertado una reacción inmediata por parte de los responsables municipales, que ya han anunciado que han solicitado una reunión de carácter urgente con Acuña para intentar desbloquear esta situación.

El concejal de Hacienda del Consistorio gaditano, David Navarro, ha mantenido un encuentro con los empresarios afectados para estudiar las posibles alternativas que pueden llevarse a cabo, teniendo en cuenta que el plazo para llevarlas a cabo finaliza el 30 de noviembre.

Durante el encuentro, Navarro ha asegurado que los empresarios les han expuesto varios argumentos que quieren cotejar directamente con la Junta de Andalucía y que permitirían abrir las puertas al inicio del procedimiento de modificación sustancial, la única posibilidad que se contempla actualmente para que los chiringuitos puedan abrir durante la temporada de invierno.

«Queremos unificar criterios para que el asunto se solvente entre todas las partes y que Cádiz pueda ofertar chiringuitos durante el invierno, siempre sin que ninguna administración vulnere la Ley», afirmó el edil, que puso de relieve que aunque el Ayuntamiento no ha pedido la tramitación necesaria, ha dado todos los pasos para ello, como la solicitud de toda la documentación a los empresarios.

Además, Navarro ha adelantado que si en la reunión se confirman los aspectos transmitidos por los empresarios, se presentará la modificación sustancial que garantizaría la permanencia de los establecimientos en la playa durante el resto del periodo de la concesión.

De este modo, el Ayuntamiento daría un giro radical a la posición que ha mantenido desde el principio con respecto a este asunto. De hecho, el pasado lunes decidió no dar el paso definitivo, al argumentar que no estaba dispuesto a solicitar el permiso oficial, ya que un informe jurídico solicitado por el secretario municipal a la Comisión Consultiva de Contratación Pública de la Consejería de Hacienda y Administración Pública de la Junta de Andalucía interpreta que dicho procedimiento «vulneraría el principio de libre concurrencia al suponer una modificación sustancial del contrato inicial».

Ante esta situación, los chiringuitos aún no saben sin tendrán que cerrar o no sus puertas. En el caso del chiringuito Nahú Beach, tendría que comenzar ya las labores de desmontaje, ya que solo tenía permiso hasta el pasado día 31 de octubre, mientras que los otros cinco establecimientos podrán permanecer abiertos hasta el 30 de noviembre, tal y como marca el actual pliego de condiciones. No obstante, parece que estos plazos podrían alargarse algunos días más a la espera que se concreten las acciones que se van a llevar a cabo.

En caso de que el Ayuntamiento no acepte llevar a cabo el procedimiento que exije el Gobierno regional, la situación podría acarrear numerosas consecuencias, tanto judiciales como en lo que respecta a las relaciones políticas entre el ente autonómico y el consistorio gaditano. En este sentido, los empresarios ya han advertido que no van a desmontar sus instalaciones y en estos momentos están estudiando la posibilidad de tomar acciones judiciales y medidas de presión contra el Ayuntamiento. «El actual pliego de condiciones ya está modificado. Ya tenemos más espacio de terraza de los que marca el pliego y el año pasado ya se incumplió el periodo de permanencia, ya que estuvimos abiertos durante todo el invierno, así que no entendemos por qué ahora no quiere adaptarse al nuevo reglamento de Costas», explicó Antonio Guerrero, el presidente de la Asociación de Empresarios Costa de Cádiz (Aeca).

Además, los empresarios han puesto de relieve que el cierre de los chiringuitos supondría un varapalo, ya que muchos de ellos ya han hecho inversiones de cara a la temporada de invierno, tanto en recursos materiales para adaptar las instalaciones como en lo que respecta a cuestiones laborales. Además, los empresarios cifran en medio centenar el número de puestos de trabajo que se perderían en caso de que cese la actividad.