Martínez desmiente que la paralización del puente se deba a falta de fondos

La alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, ha desmentido hoy que la paralización de las obras del segundo puente sobre la Bahía gaditana, se deba a «ningún impago» por parte del Ministerio de Fomento y atribuye esta decisión de Dragados a una «medida de presión» ante las modificaciones del proyecto.

Martínez ha asegurado hoy en rueda de prensa que el gobierno municipal es «el primer sorprendido» de esta medida, ya que «se estaba trabajando a muy buen ritmo en todos los tramos» y que, tras ponerse en contacto con el Ministerio, puede asegurar que «no se debe en ningún caso al impago de ninguna certificación» ni «a falta de recursos económicos».

La alcaldesa ha informado de que, al parecer, la empresa Dragados se ha acogido de forma unilateral a la ley que dice que, mientras se tramita un modificado de un proyecto, y si no hay acuerdo expreso, pueden paralizar las obras hasta que se apruebe de forma definitiva el proyecto.

La edil gaditana ha añadido que el montante de la obra, que se licitó en 270 millones y ya ha superado los 400, está «asegurado» en los Presupuestos Generales del Estado y que la ministra Ana Pastor tiene un compromiso «muy especial» con la provincia y en particular con esta infraestructura, una de las más costosas que está ejecutando su cartera en estos momentos.

Martínez ha adelantado que «en los próximos días la situación se solucionará porque estoy convencida que la ministra y el Gobierno van a actuar de forma contundente en la defensa de los intereses de los ciudadanos».

Hace pocas semanas daban comienzo las obras del tramo de conexión en la ciudad de Cádiz y se culminaba el tramo móvil de esta infraestructura que unirá sobre el mar la capital con el Polígono industrial del Río San Pedro, en Puerto Real.

De Torre: «La paralización es parcial»

Así mismo, el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, ha matizado en declaraciones a los medios en Sanlúcar de Barrameda, que la paralización de las obras del segundo puente es «parcial» y que sólo afecta a las partes implicadas en la modificación del proyecto, como la rotonda y "algún aspecto más". En esa misma línea, ha desvelado que «las partes no sujetas a modificación», como el atirantado del puente y el asfaltado de la parte de Puerto Real (Cádiz), «continúan ejecutándose al ritmo deseado».

De Torre ha explicado que «lo que ha habido es una modificación del proyecto que implica que, salvo acuerdo expreso entre las partes, cualquiera de ellas puede determinar la paralización de las obras, y eso ha hecho la empresa adjudicataria».

«Ahora se está viendo la cuantía económica y se están negociando las condiciones concretas para firmar ese modificado y poder continuar la obra», ha afirmado, al tiempo que ha expresado su deseo de que esta negociación de la modificación del proyecto «concluya en un plazo breve y no afecte sustancialmente a los plazos de terminación».

«Es una medida que puede tomar la empresa, se ajusta a la legalidad y lo que todos deseamos que esa negociación de la modificación del proyecto se lleve a cabo en el menor tiempo posible», ha concluido.